Valladolid

La UVA aprueba un presupuesto de 260 millones a la espera de concretar los gastos de personal

Una serie de cuestiones que ha hecho que la Universidad de Valladolid haya decidido mantener la misma cuantía que el año pasado en el capítulo de los gastos de personal, a la espera de obtener nueva información antes de que termine el año. En este aspecto, la vicerrectora también ha apuntado a que se aprobará el presupuesto, con el capítulo correspondiente «condicionado» a una modificación posterior, que será negociada en el futuro y de nuevo llevada al Consejo de Gobierno de la institución. «La propuesta es hacer lo que hacen la mayoría de las universidades, aprobar el presupuesto condicionado a una modificación». Así, el capítulo de gastos recoge en su primer apartado un importe de 168 millones de euros. Es la partida más grande del capítulo, que supone el 65% de todo el gasto previsto de la institución para 2025.

En este aspecto, la UVA también prevé seis millones de euros para acometer las obras previstas en los cuatro campus de la universidad. La mayor partida irá para el polideportivo de Segovia, con 1.200.000 euros y para construir otro en Soria, por un importe de 600.000 euros. Además, las nuevas titulaciones de la universidad también ampliarán sus servicios, como el grado de Ciencias Gastronómicas de Palencia, donde se destinan 350.000 euros para construir las cocinas necesarias para impartir algunas clases. Además, se destinan 200.000 euros para la facultad de Medicina de Valladolid, y otro 1.200.000 euros para el animalario de la misma. Dentro de las obras y reformas menores, se incluyen actuaciones en el palacio de Santa Cruz -inmerso en la fase final de su restauración-, en la residencia Alfonso VIII o en Fuente de la Mora. En el capítulo de gastos también se recoge el incremento de transferencias a familias e instituciones sin ánimo de lucro en 400.000 euros, por el aumento de becas de los programas nacionales (SICUE) e internacionales.

La aprobación del presupuesto viene acompañada además de una novedad más allá de las propias cantidades. Que se ha dado el visto bueno para el principio del ejercicio, mientras que otros años era habitual que se hiciera durante el primer trimestre. «Se produce algo que no es habitual. De forma reiterada, en un ejercicio de garantismo, se ha esperado a tener la información suficiente para minimizar la necesidad de hacer modificaciones. Este año, en los informes del Consejo de Cuentas de Castilla y León, se reiteraba que esto era una debilidad económica de la UVA, que el presupuesto no estuviera el 1 de enero -se prorrogaba el anterior-. Se recomendaba modificar la forma de proceder, y este año se ha conseguido», ha apuntado la vicerrectora.

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En otros apuntes, la UVA también ha actualizado algunos gastos, como por ejemplo los que corresponden a las dietas, por la subida de precios en los hoteles. «Era más alto del autorizado y generaba problemas. También se ha intentado dar respuesta a la situación económica actual». Frente a los gastos, los ingresos. Este año, la institución marca 200.000 euros más en el apartado de transferencias corrientes. La fuente de ingresos más importante es la que proviene desde la administración autonómica, que representa el 70% del total. Además, la universidad ingresa 21 millones de euros por los servicios docentes universitarios, donde se incluyen las propias matrículas de las titulaciones. La vicerrectora también ha hecho referencia al descenso en el gasto en inversiones reales en un millón y medio de euros, relacionado con una bajada del gasto en infraestructuras, mientras que se incrementa el gasto en investigación realizada por la propia institución.

El proyecto del presupuesto se ha aprobado durante la Junta de Gobierno de la institución, donde también se ha dado luz verde a la creación de 142 plazas de ayudante doctor, 92 de las cuales corresponden con la aplicación del programa María Goyri, financiadas por el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. El resto de plazas son las previstas en las líneas de actuación aprobadas por el Consejo de Gobierno en marzo de este año. En la sesión también se ha aprobado a la transformación de 10 plazas de profesor titular de universidad en catedrático.