Cientos de compañeros, profesores y amigos de Miguel Li Fernández, el joven de 21 años fallecido durante el pasado viernes en la Facultad de Fisolofía y Letras, se han dado cita este lunes en el vestíbulo principal del edificio para despedir a un alumno muy ... querido y conocido entre sus compañeros de Periodismo. Estaba previsto que el acto se llevase a cabo en la planta baja del edificio, pero ha sido tal la afluencia de personas que han querido acercarse, acorde con la popularidad del joven, que la multitud llegaba hasta el tercer piso.
Publicidad
No ha estado presente físicamente su familia, que ha hecho llegar un «fuerte abrazo» y unas palabras para mostrar su agradecimiento a la comunidad universitaria «por todo el cariño recibido en estos momentos tan complicados». Ha sido su círculo más cercano de la clase de Periodismo el encargado de pronunciar unas palabras en recuerdo del joven, desatando las lágrimas de los presentes. El grupo ha estado arropado por el personal docente y administrativo, el rector de la Universidad de Valladolid (UVa), Antonio Largo, y algunas autoridades -entre ellas el alcalde, Jesús Julio Carnero, a quien Miguel tenía previsto entrevistar-.
Compañero de Periodismo de Miguel Lí
«De palabra fácil, todos sabíamos quien era Miguel», sollozaba frente al micrófono el primero de los alumnos encargados de la lectura, que ha resaltado el carácter social y atento de un chico «único y auténtico». Entre los muchos gestos de Miguel que calaron entre sus compañeros, ha recordado como durante una pachanga futbolera se acercó al campo con botellas de agua para sus sedientos amigos: «Todos de alguna forma éramos importantes para él».
Sus compañeros también han lamentado la pérdida para la profesión de una figura como la de Miguel, un chico ambicioso, reconocido por su potencial entre el alumnado y el profesorado, siempre dispuesto a «interrumpir» la clase cuando creía necesario hacer sus observaciones. «No tendrá la oportunidad de convertirse en el periodista que soñaba», lamentaba el joven, que tras finalizar el discurso tildando la pérdida como «una lección de vida demasiado dura», ha roto a llorar.
«Jamás he conocido a alguien tan especial y altruista», proseguía otro compañero de su grupo de amigos, con quienes había compartido un viaje a Malta hacía unas semanas. Durante el mismo compartieron algunas charlas y confidencias sobre momentos delicados: «En un inglés con tono gallego me dijiste, que a pesar de las cosas malas, The Show Must Go On».
Publicidad
Noticias relacionadas
El joven también ha querido resaltar el potencial de Miguel como profesional en ciernes, siempre dispuesto a conversar sobre política y a aportar algún dato económico sorprendente: «El periodismo y tú erais uno. No se podía entender a Miguel sin su carrera», afirmaba, tras recordar algunos chascarrillos de lo vivido entre las paredes de la facultad: «Va a ser extraño entrar en clase y no verte venir con tu maletín. Tú eras el alma de la clase».
El sentido homenaje ha finalizado con un minuto de silencio, durante el que solo se han escuchado los inevitables sollozos de los más cercanos, muy afectados por lo sucedido. Al final del acto los amigos del joven han expresado su deseo de que en un futuro una de las aulas de la facultad pueda llevar el nombre de Miguel Li Fernández Fernández.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.