Consulta la portada del periódico en papel
Expositores en una tienda de electrodomésticos. Antonio Tanarro

Tres juzgados de Valladolid instruyen denuncias por 'la estafa de la aspiradora'

Tribunales ·

Los denunciantes compraron electródomésticos a domicilio a una comercial que luego usó sus datos para pedir créditos valorados en 12.000 euros y quedarse con el dinero

M. J. Pascual

Valladolid

Martes, 30 de mayo 2023, 00:04

Por el momento son cuatro los vecinos de Valladolid los que han denunciado haber sido víctimas de 'la estafa de la aspiradora', aunque fuentes de la investigación no descartan que puede haber más víctimas de una joven comercial, supuesta representante de una empresa radicada ... en León. La mujer les vendió a domicilio electrodomésticos financiados por créditos y después utilizó los datos personales de sus clientes para solicitar más préstamos no autorizados por ellos y quedarse con todo el dinero. En total, la cantidad defraudada asciende a 12.000 euros, según refieren los atestados policiales y diligencias abiertas en tres juzgados de la capital por posibles delitos de suplantación de identidad y estafa.

Publicidad

Los afectados por este engaño, indican los atestados, no solo se han visto endeudados por créditos que no habían contratado, sino que desde entonces han sido hostigados por las empresas prestamistas, que les han amenazado con sus servicios jurídicos y también con inscribir sus nombres en listas de morosos si no abonaban las cuotas reclamadas.

Según los denunciantes, una joven, que se presentaba en su domicilio como comercial de una empresa denominada Grupo Hogar, con supuesta sede social en la capital leonesa, les mostraba un catálogo con productos y ellos eligieron, entre ellos, «una colección enciclopédica que venía con una aspiradora», indicaron fuentes jurídicas. Lucinio L. D. P., de 66 años, cuyo caso está siendo investigado por el Juzgado de Instrucción 4 de Valladolid, adquirió el 9 de mayo de 2019 productos por valor de 4.500 euros y suscribió un préstamo con Cofidis para la financiación de los mismos. La vendedora, sostiene en su denuncia en Comisaría de Delicias, suscribió un segundo préstamo «que no firmé y cuya cuantía nunca he percibido, pudiendo haber usurpado mis datos con fines espurios, lucrándose a mi costa con dicha cantidad, pues en apariencia soy yo el suscriptor de dicho préstamo».

Bancos en línea

Al parecer, la empresa de préstamos hizo efectiva la cantidad en una cuenta del banco on line Evo, una cuenta de la que el matrimonio no es titular, pues ni siquiera son clientes de esta entidad. La joven comercial, que se hacía llamar Laura para sus clientes (y resultó llamarse Nerea en realidad), usurpó sus datos, dio una cuenta a la empresa de préstamos y se quedó con el dinero.

Publicidad

Este denunciante subraya que Cofidis, a pesar de conocer lo ocurrido, le reclama desde febrero de 2021 «de forma hostil y con bastante hostigamiento el pago de dicha cantidad del segundo préstamo no solicitado», 4.000 euros, con cartas en las que se le apercibe de que si no abona ese dinero entrará «en un registro de morosos».

La vendedora a domicilio rellenó los formularios y tomó fotografías del DNI del cliente con su teléfono móvil

En mayo de 2022, después de que la Audiencia de Valladolid acordara reabrir el asunto (que se había archivado inicialmente por el Juzgado de Instrucción 4) por entender que no era un asunto civil de consumidores y usuarios, sino que existían indicios un delito de estafa, el fiscal ordenó que se pidiera a Evo Bank el IP desde donde se abrió la cuenta fraudulenta. Dos meses antes, el jubilado y su esposa habían reconocido, entre las fotos que les mostró el Grupo de Investigación de Delincuencia Económica, a 'Laura', la vendedora, de forma «clara, determinante y sin ningún género de dudas». Esta había rellenado los formularios necesarios para la compra con Grupo Hogar y la financiación con Cofidis. La mujer realizó fotografías del DNI del cliente, por ambas caras, con su teléfono móvil.

Publicidad

En realidad, la comercial de Grupo Hogar que se hacía llamar Laura Fernández Gil se llama Nerea A. R. y tiene abiertas causas por estafas similares en otros dos juzgados de Valladolid. El 20 de febrero de 2021, la hija de la zamorana María V. C., de 78 años, que reside en la capital vallisoletana, denunciaba en la Comisaría de Delicias que Cofidis había llamado varias veces a su madre reclamándole el pago de 2.000 euros de un crédito que supuestamente habían contratado en noviembre de 2020. Un crédito del que madre e hija no tenían constancia. Cofidis les manifestó que el dinero se había ingresado en forma de tarjeta bancaria en la que figuraban los datos personales de la denunciante, pero la dirección de envío y el correo electrónico relacionado con dicha tarjeta no pertenecían a la denunciante, sino a una dirección de La Cistérniga (Valladolid). La afectada cayó en la cuenta que la usurpación de sus datos pudo tener origen en una serie de contratos y compras que realizó a comerciales que visitaban su domicilio ofreciendo productos para el hogar.

Por teléfono

Algo parecido le ocurrió a Francisca F. M, de 60 años, quien se percató en mayo de 2021 que en su cuenta del banco le cobraron una cuota de 194 euros en concepto del pago de una cuota en un préstamo con Cofidis. Ella tenía contratado desde 2019 un préstamo de 4.500 euros como financiación de unos productos comprados en Grupo Hogar y pagaba la cuota religiosamente. Pero vio que le habían pasado una cuota a mayores cuando «no había autorizado ni consentido ni solicitado ninguna otra operación con esa entidad». La empresa de préstamos le informó de que tenía a su nombre contratato otro préstamo desde abril de 2021 por 4.000 euros. Pero el dinero no había sido ingresado en su cuenta sino en otra desconocida y el domicilio aportado no era el de la denunciante en la capital, sino otro de La Pedraja de Portillo (Valladolid). Alguien que se hizo pasar por ella contrató ese dinero por teléfono.

Publicidad

Un cuarto afectado por las artimañas de Nerea es Dionisio B. M., de 58 años, también residente en la capital vallisoletana. Junto con su hermana, pues el hombre tiene una discapacidad del 87%, acudió a la Comisaría de Delicias el 22 de julio de 2021 porque le había llegado un requerimiento de pago de Cofidis sobre un crédito de 2.000 euros que él no había solicitado. Como les ocurrió a los otros denunciantes, sí había formalizado un préstamo anterior de 4.500 euros por una compra con Grupo Hogar y la tal Laura Fernández Gil que pagaba regularmente, pero el otro no. Alguien cobró ese dinero que fue transferido a una cuenta en Openbank que no era suya.

La detención de 'Laura' como presunta autora de un delito de estafa se produjo el 29 de abril de 2022 por funcionarios de la Policía Nacional, a instancias del Juzgado de Instrucción número 5. Nerea A. R., de 36 años en la actualidad, reconoció en la Comisaría que trabajó como comercial de empresas de venta a domicilio y que, entre 2019 y 2020, visitó a María V. C. y a Francisca F. M., que les vendió productos y que utilizó sus datos para solicitar líneas de crédito a nombre de ellas para conseguir dinero, que se gastó. El Juzgado de Instrucción 3 relacionó en noviembre de 2022 ambos casos con los de Lucinio y Dionisio. La tramitación del asunto prosigue en el Juzgado de Instrucción 4, que tendrá que llamar a declarar a la presunta autora de las estafas, que está en libertad pero a disposición judicial.

Publicidad

.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad