

Secciones
Servicios
Destacamos
Forma parte de la tercera generación y le ha tocado vivir el único cambio de local por causas ajenas a su negocio. Este tradicional comercio, ... asentado en la Bajada de la Libertad desde hace más de un siglo, tuvo que cambiar su emplazamiento hace año y medio porque el propietario del inmueble tenía otros planes. «Nos dijeron que iban a renovar el edificio y que teníamos que irnos», cuenta. Y así lo hicieron. Empaquetaron cien años de historia y comenzaron a buscar un nuevo establecimiento en el que asentar su negocio.
«La búsqueda no fue fácil porque las rentas eran altísimas para lo que ofrecían. Además, nos costó decidirnos porque muchos propietarios no querían hacernos contratos de más de cinco años y exigíamos, como mínimo, quince», explica Nacho Sánchez, quien quiere jubilarse trabajando en su tienda y con unas condiciones «dignas hasta el final».Además, explica que, en realidad, «los precios de los locales se rigen por lo que se paga, no por lo que piden, porque hay muchos que llevan varios años vacíos».
Noticia Relacionada
El cambio se produjo en una situación delicada, pues les pilló la pandemia. «En marzo del año pasado cerramos el antiguo local y en mayo abrimos en el nuevo, por lo que hicimos la mudanza en pleno confinamiento domiciliario». Con la dificultad añadida de la incertidumbre existente en ese momento, recordaron los primeros pasos que sus antepasados tuvieron que dar, aunque la tranquilidad de contar con una clientela fiel ha ayudado en el cambio. «Lo bueno es que los que llevan comprando aquí muchos años lo siguen haciendo, y con el cambio de local nos hemos acercado a los clientes de esta zona», confiesa.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.