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Es un punto negro de tráfico. Un calvario en hora punta. La rotonda del colegio San Agustín, en la Carretera de Madrid, se ha convertido en una estación de penitencia obligada, en especial para los conductores que a diario acceden a la ciudad procedentes de ... otros municipios del cinturón de la capital, como Laguna de Duero o Boecillo, entre otros. El Ayuntamiento de Valladolid está ultimando el proyecto de rediseño de esta vía en el que se contempla la construcción de un túnel bajo este nudo para descongestionar el alto volumen de vehículos que circula por él. Los redactores del proyecto –la empresa Consulting de Ingeniería Civil SLP– ya ha planteado al Consistorio un avance de la solución: un paso deprimido que arrancaría en la N-601 en dirección centro, antes del conflictivo cruce, y que embocaría el tráfico bajo tierra con un giro a la izquierda para sacarlo en la ronda interior (VA-20) hacia el polígono de Argales.
El modelo, salvando todas las distancias de anchura, altura y requisitos técnicos, se asemeja al del actual túnel de Daniel del Olmo, que conduce a los coches que atraviesan ese área industrial hacia el Paseo de Zorrilla en dirección al centro comercial Valsur.
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J. Asua
Ahí van los datos aportados por el área de Movilidad y recogidos por los aforadores. Un día laborable atraviesan San Agustín un total de 64.968 vehículos en todas las direcciones. De ellos, 19.398 circulan por esta vía hacia el centro de la ciudad y la avenida de Zamora. Un porcentaje importante son camiones que giran a derecha o a izquierda para coger la VA-20. Mientras que en el primer caso su salida es más fluida, hacia Argales el tema se complica. Los tráileres con destino al polígono o más allá son los que provocan los problemas más graves al quedarse en muchas ocasiones cruzados en la rotonda hasta que el semáforo les da vía libre para continuar. Esta situación genera importantes retenciones al no haber un espacio suficiente de acumulación de vehículos. Resultado: un caos diario en las horas punta de mañana y mediodía.
Así, el túnel permitirá que ese tráfico pesado (y también el de turismos o furgonetas) coja su rampa y por el canal subterráneo siga su viaje sin tener que hacerlo en superficie, un alivio, sin duda, para los que a diario transitan la zona.
El presupuesto de la intervención en la Carretera de Madrid, sin contar con este paso subterráneo, alcanza los 2,3 millones de euros. Esa cantidad se destinará a la reforma de la vía entre Juan Carlos I, cuya conexión también está previsto mejorar, aunque este caso en superficie, y el conflictivo cruce situado junto al centro educativo.
La construcción de este subterráneo debe concretarse con un proyecto específico en el que se incluirá el coste de ejecución, que se prevé elevado. La idea del equipo de gobierno es implicar al Ministerio de Transportes en esta obra, ya que la titularidad de la vía desde la línea de detención del semáforo hacia Laguna de Duero es estatal.
La rotonda de San Agustín está muy presente en la hemeroteca y no precisamente por su estética y fluidez circulatoria. Monumentales atascos y accidentes de mayor y menor gravedad han llenado en multitud de ocasiones las páginas de El Norte. Desde los mandatos de Javier León de la Riva, esta conexión ha sido una espina en la gestión del tráfico en la ciudad. El exregidor ya intentó en varias ocasiones implicar al Gobierno en la solución, aunque las conversaciones no llegaron a fructificar. La construcción de la ronda exterior (VA-30) se veía como una alternativa que podría acoger parte del tráfico que circulaba por este punto. Sin embargo tras su apertura al completo, en julio de 2014, se comprobó que la circunvalación absorbía coches, pero se mantenían los atascos en San Agustín. Yasí ha seguido desde entonces, siempre con la promesa de una solución que no ha llegado hasta el momento. La excavación del túnel que se incluye en el proyecto de mejora de la Carretera de Madrid se sumaría, sin contar con los que salvan las vías (ahora con otro en ejecución en Andrómeda), a los excavados en Daniel del Olmo y la avenida de Salamanca. Este último, con el que se buscaba aliviar la congestión en el nudo con Sánchez Arjona y Padre José Acosta y que provocó una importante polémica política, se inauguró en julio de 2010.
Considera Manuel Saravia, concejal de Planificación Urbanística, área que lleva esta intervención, que es necesaria esa colaboración para afrontar una solución que desatasque la conexión y minimice al mismo tiempo los riesgos para los usuarios al ser escenario de decenas de accidentes de chapa y también con heridos y fallecidos.
El túnel es solo una parte de la intervención en este tramo urbano de la N-601, aunque sin duda la más esperada. La reforma de esta vía prevé un profundo lavado de cara, entre la confluencia del Paseo de Arco de Ladrillo con Juan Carlos I y la glorieta de San Agustín, que incluye la construcción de aceras y ampliación de los canales peatonales allá donde los haya y la habilitación de un carril bici segregado. En todo caso, se mantendrán los dos carriles de circulación por sentido, aunque redimensionados a las medidas urbanas y no a las de carretera nacional.
Manuel Saravia subraya que el propósito es mejorar los accesos a la ciudad, especialmente para peatones y ciclistas, así como regenerar su estética con la plantación de arbolado. «Se integra en un conjunto de actuaciones en marcha, previstas en otras zonas de la ciudad, como el Camino Viejo de Simancas y la carretera Fuensaldaña, pero en este caso hay que atender a algunas cuestiones añadidas: valorar y mejorar el recorrido de las Arcas Reales y desarrollar la vía verde de Ariza», explica. Así, está previsto construir un amplio bulevar para el paseo cuando se concluya la variante de mercancías y los trenes de carga de Renault dejen de utilizar el histórico canal ferroviario. Mejorar la seguridad del tráfico rodado es el otro objetivo, en los cruces de la avenida de Madrid con Juan Carlos I y sobre todo con la ronda interior (VA-20). «Toda esa corona, ese entorno de los accesos a las ciudades, de paso entre el suelo urbano y el rural, constituye uno de los espacios menos amables y más inseguros y por eso este equipo de gobierno está trabajando para su mejora de forma decidida», subraya.
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