Valladolid

El tormentón del viernes condicionó durante doce horas la conexión entre ambos lados de la vía

Durante ese tiempo, desde las 22:00 a las 23:30 horas, el centro de Emergencias 112 recibió decenas de llamadas y gestionó avisos por 102 incidentes. Los Bomberos tuvieron que realizar 48 intervenciones, de acuerdo con los datos facilitados por Alberto Cuadrado Toquero, concejal de Seguridad Ciudadana, quien explicó que buena parte de las salidas tuvieron lugar en «viviendas, garajes, trasteros o cubiertas en mal estado», sin que hubiera que reseñar incidentes destacados. El 112 explica que hubo 50 avisos por inundaciones y una treinta por filtraciones de agua. Sacyl tan solo tuvo que atender a una persona que sufrió una caída por culpa de la lluvia y que necesitó asistencia por una herida en la cabeza, informa Ical. Además, se gestionaron incidencias por peligros para la circulación, obstáculos en la calzada, cortes de suministro de electricidad y tres accidentes viales sin heridos.

Durante la mañana de este sábado han continuado sus servicios, especialmente para achicar agua de garajes (por ejemplo, en la calle Esgueva). Durante estas horas, también ha sido crucial la labor de la Policía Municipal y de Protección Civil. Además, los Servicios de Limpieza se han sumado este sábado para retirar el barro y fango que la resaca de la tormenta ha dejado en varios puntos de la ciudad, como Portugalete.

Durante el aguacero (hubo 371 descargas eléctricas) y los minutos posteriores, los avisos más urgentes estuvieron vinculados con los pasos subterráneos que conectan la ciudad por varios puntos bajo las vías. La situación más comprometida se vivió en el túnel de Circular-San Isidro, donde una conductora que se aventuró a cruzar el paso inferior se quedó atrapada, con el vehículo totalmente sumergido bajo el agua, por lo que tuvo que ser rescatada.

La enorme cantidad de agua acumulada en el paso subterráneo (cuyo alcantarillado fue incapaz de asumir tanta lluvia) hizo que estuviera cortado durante más de doce horas, lo que condicionó la comunicación a ambos lados de la vía. Los bomberos intervinieron durante horas para achicar agua y operarios de Aquavall terminaron de poner finalmente el túnel a punto. Los carriles en dirección hacia el centro de la ciudad se reabrieron pasadas las 10:00 horas de este sábado y los que se dirigen hacia el paseo de San Isidro y la carretera de Soria se recuperaron sobre las 10:45 horas.

También durante la noche del viernes (Valladolid estuvo en alerta amarilla) fue imposible circular por los anegados túneles de Andrómeda (al norte de la ciudad, en Pilarica) y Panaderos (en el centro). El primero se reabrió sobre las 23:40 horas y el de Panaderos, poco después.

De este modo, durante los momentos posteriores a la tormenta, era ciertamente complicado conducir entre ambos lados de la vía en Valladolid, ya que buena parte de las conexiones quedaron inutilizadas.

La concejala Irene Carvajal (Vox) afirmó que una ciudad «cosida» por túneles, en días de fuertes lluvias como las registradas este viernes, dejan a la ciudad «dividida e intransitable», de manera que la «única manera de remediarlo es el soterramiento», informa Europa Press. El ministro de Transportes, Óscar Puente, le contestó a través de las redes sociales:«Carvajal no sabe que el soterramiento es un gran túnel en el que se recogería todo el agua de lluvia en noches como la de ayer [por el viernes]». El exalcade del PSOEironizó con que «a lo mejor Carvajal está pensando en soterrar la calle Angustias también», puesto que esta vía se vio afectada.

El agua también obligó a cortar durante dos horas el acceso al aparcamiento subterráneo de la Plaza Mayor, según informan desde Movasa, que coordina los servicios de movilidad del Ayuntamiento. El festival Conexión Valladolid, que se celebraba en la antigua hípica militar, tuvo que suspender parte de los conciertos de la jornada (Pignoise y Vetusta Morla), ya que la lluvia dejó inutilizados los equipos de sonido y luces, informaron desde la organización.

Por la mañana, los servicios de Bomberos y Policía Municipal todavía tuvieron que intervenir en varias zonas de la ciudad (además de en el túnel de San Isidro) para resolver problemas derivados de la tormenta. En el inicio de la calle Villabáñez (a la altura del túnel de Casasola) tuvieron que precintar un tramo de acera, cerca del número 3, por el desprendimiento de parte de la fachada, en uno de los balcones del inmueble.

También tuvieron que acercarse hasta la calle Don Sancho, donde fue requerida su presencia. Hubo más dotaciones en la calle Esgueva, donde tuvieron que achicar agua de garajes y locales, con su presencia en el hotel Nexus y en el portal de El Niño Perdido. Y también en la plaza San Francisco de Asís, con varios desprendimientos de una pared medianera.

La calle Esgueva fue una de las más afectadas, ya que se encuentra en una pequeña depresión física, a un nivel más bajo que las vías adyacentes, lo que hizo que el agua corriera hacia allí. También sufrió especialmente Portugalete, con varios centímetros de agua durante lo más duro de la tormenta. Este sábado por la mañana, operarios municipales intentaban con una manguera retirar el fango y barro que cubría la calle. Numerosos charcos por la ciudad fueron testimonio del paso de la tormenta por Valladolid.