Solo dos de las 55 personas que se suicidaron en 2022 tenían seguimiento médico

La tasa es de 8,52 casos por cien mil habitantes, similar a la del resto del país, aunque en el conjunto autonómico sí resulta ligeramente más alta.

Según los datos de la Estrategia de prevención de la conducta suicida en Castilla y León 2021-2025, en el año 2019 en Castilla y León se produjeron 218 suicidios, de los que 165 fueron llevados a cabo por hombres y 53 por mujeres. Supone una tasa bruta anual de suicidios de 9,05 por cien mil habitantes, mientras que la tasa ajustada, que elimina las diferencias estructurales por edades de las poblaciones, fue menor, de 6,79.

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Sofía Fernández

En las últimas décadas, Castilla y León se ha mantenido, en general, por encima de la media española, en torno a un punto. Esta es una comunidad envejecida y la mayor parte de estas muertes se registran entre personas mayores.

La evolución de las tasas ajustadas de varones y de mujeres en las últimas décadas no es muy distinta, ligeramente descendente en el caso de los hombres y discretamente ascendente en el dato femenino. En el caso de los hombres a partir de los 79 años, se incrementa significativamente el riesgo de suicidio, mientras que en el de las mujeres la tasa no experimenta variaciones significativas por rango de edad, presenta valores más estables. El grupo etario de entre 40 y 49 años es el que muestra la tasa más elevada, de 6,66.

Los medios empleados en Castilla y León con mayor frecuencia para llevar a cabo los suicidios son el ahorcamiento (42,66%), saltar desde un lugar elevado (27,06%), y ahogamiento y sumersión (5,96%). El método más utilizado por los hombres para suicidarse es, de forma significativa, el ahorcamiento o estrangulamiento, con el 44,85% de los casos, mientras que las mujeres utilizan tanto este método como saltar desde un lugar elevado en el mismo porcentaje, el 35,85%.

El ahorcamiento es un método accesible y de difícil restricción, que se puede llevar a cabo con una cierta diversidad de objetos, con lo cual resulta difícil limitar el acceso al mismo. Según un estudio realizado en el área de Valladolid, se considera que la ahorcadura es el método más utilizado por ambos sexos y en el ámbito rural. Por otro lado, la precipitación desde un lugar elevado es más común en los núcleos urbanos, debido a las características arquitectónicas de las ciudades.

Además los datos muestran que «las zonas más rurales tienen más casos. En Castilla y León son Soria, Zamora y Ávila las provincias con mayores tasas mientras que, quizás llamativamente, Valladolid tiene cifras menores», destaca el jefe de Psiquiatría, Fernando Uribe.