Valladolid

Septiembre pierde turistas, pero los viajeros se quedan más días, con récord de precios en los hoteles

Si se amplía la mirada no solo al mes de septiembre, sino al conjunto del verano (con la suma de julio y agosto), Valladolid vive una de cal y otra de arena. Han bajado los viajeros (3.414 menos en julio, 2.964 menos en agosto y 3.036 menos en septiembre), pero, por el contrario, las pernoctaciones han subido, gracias al buen comportamiento de julio (999 más) y, sobre todo, agosto (2.918 más), que compensan la caída de 876 en septiembre.

Así, con respecto al año pasado, la capital ha perdido este verano casi diez mil viajeros (9.414 menos). A cambio, ha incrementado sus pernoctaciones (suben en 3.041). Hay que tener en cuenta, además, que estos datos hacen referencia a los establecimientos hoteleros, sin atender a los viajeros que se hospedan en apartamentos turísticos, cuyas cifras para septiembre publicará el INE la próxima semana.

A pesar de este descenso en turistas y pernoctaciones, septiembre de 2024 ha batido récord en la estancia media para este mes. La última cifra se sitúa en 1,89 jornadas, lo que supone que se ha estado muy cerquita de alcanzar las dos noches de hotel por turista, una larga aspiración de las políticas de Turismo en Valladolid, que apuntan a retener a los viajeros durante más tiempo en la ciudad, ya que eso conlleva más desembolso en actividades complementarias como hostelería o comercio. La segunda mejor marca de estancia media (1,79 días) se registró en 2015 y 2018.

Y esto se da, además, en un momento en el que los hoteles han conseguido mejorar sus ingresos por habitación disponible. En septiembre de este año se ha situado en 59,68 euros, de acuerdo con los datos del INE. En el mismo mes de 2023 fueron 55,07 euros. Este incremento viene motivado, entre otros factores, por la subida de precios. Valladolid ha alcanzado la tarifa media más alta para un mes de septiembre desde que existen registros (2021). Se sitúa en 82,05, por encima de los 76,65 euros del pasado junio y de los 76,69 que marcó octubre de 2023. Respecto a septiembre de 2023, son casi diez euros más (entonces, 72,79). Este indicador, la tarifa media diaria, hace referencia a «los ingresos medios obtenidos por habitación ocupada, teniendo en cuenta el tipo de cliente al que se le ha aplicado», explican desde el INE, donde recuerdan que la cifra se refiere al «servicio de alojamiento, sin incluir otro tipo de servicios que puede ofrecer el establecimiento, como restauración, spa, gimnasio o la organización de reuniones y eventos».

Estos precios medios para Valladolid (82,05) se posicionan por debajo de la media nacional, fijada en 125,22 euros. Las tarifas más altas están en la costa malagueña, con Estepona (246) y Marbella (234) en cabeza. Después se sitúan San Sebastián (221) y Barcelona (210). Las más bajas están en Ponferrada (52,9) y Ciudad Real (56,73). El INE recoge este indicador en 106 localidades españolas (incluidas capitales de provincia y puntos especialmente turísticos). Valladolid se sitúa en mitad de la tabla, en el puesto 56, con unas tarifas equiparables a las de ciudades como Almería y Segovia (86) o como Oviedo, Vigo y Gijón (81).

Si en lugar de la ciudad nos fijamos en el conjunto de la provincia, el precio medio en Valladolid es de 80,9 euros, también por debajo de la media nacional. En este caso, las provincias con los hoteles más caros son Guipúzcoa (174,41 euros), Barcelona (165,55) y Madrid (149,99).

Los datos por puntos turísticos y provincias no permiten discriminar el precio por categoría de hotel, aunque en el conjunto nacional sí que se ven las diferencias de un tres estrellas (101 euros de media), uno de cuatro (129) y uno de cinco (281).

El pasado mes de julio, la asociación hoteles de Valladolid explicó que uno de los indicadores más importantes para la rentabilidad del sector no está solo en el incremento de viajeros y pernoctaciones (que es algo positivo). «La valoración se debe hacer entre pernoctaciones y precio medio y buscar incrementar este dato para posicionar Valladolid al nivel de otras ciudades similares. Para conseguirlo tenemos que seguir trabajando la captación de eventos de todo tipo y congresos», aseguraron entonces desde el sector.

Como explica el INE, este indicador se calcula en función de las habitaciones ocupadas, por lo que no tiene en cuenta las plazas hoteleras sin cubrir. Este indicador de ocupación descendió en septiembre de 2024 con respecto al mismo mes del año pasado. La ocupación media por plazas pasó del 63,04% al 58,63%. La de fin de semana bajó del 75,12% al 72,9%. Y la de habitaciones se contrajo, del 76,29% al 73,25%. ¿Por qué se genera este retroceso, pese a que suben turistas y la estancia media? La explicación habría que buscarla en el número de plazas disponibles, ya que ha aumentado en la capital: de 1.981 a 2.050.