Los vecinos de Pinar de Jalón alertan de ocho focos de escombros en pocos metros

El paisaje es desalentador. El punto negro más importante está justo en una de las zonas más tupidas de pinar. Allí hay hasta 50 sacos de escombras, restos de tuberías, chapados de conglomerado, viejas cajas de una empresa de pasamanería y decoración y una pizarra (con letras escritas en cuatro colores) que recogía encargos de cojines, bordados y colchonetas a importantes firmas de la ciudad. En algunos casos, además, con la pregunta de si había que hacer «factura oficial».

Justo al lado, un montón de botellas y latas de refresco. Unos árboles más allá pueden verse varias bolsas de supermercado con bricks de leche, cajas de helados, botellas vacías de lejía y hasta sábanas, peluches, juguetes y una colección de bañadores de mujer. El sucio catálogo se completa con un dos colchones, sacos de escayola, paneles de embalaje, tuberías y restos de cerramientos acristalados.

Los vecinos han reclamado al Consistorio la limpieza y pedido más vigilancia para evitar que el vertedero crezca. El Ayuntamiento ha iniciado una campaña de erradicación de estas zonas de vertidos irregulares con un listado de espacios conflictivos. La ordenanza de protección del medio urbano (del año 2018) prevé multas de hasta 1.500 euros en los casos más graves de vertidos. aquellos que generan problemas de salubridad, como los de Juana Jugan.

En esta zona, los Bomberos deben intervenir de forma periódica (cuatro veces este verano) ante los incendios que se registran en zonas donde se acumulan basuras de forma incontrolada. La Policía Local impuso el año pasado 164 infracciones, sin bien la mayor parte fueron sanciones leves, ante la dificultad de pillar 'in fraganti' al infractor.