Valladolid

La reurbanización de la calle Ebro dignifica uno de los márgenes de Las Viudas

El cierre será tanto peatonal, en una de las dos aceras, como para los vehículos, en su totalidad. Así, se han cortado los accesos desde la avenida de Segovia, en ambas direcciones, y también desde la calle Guadalquivir, una de las salidas desde el entorno de Aramburu. El único acceso permitido es para los vados autorizados que existen en la calle, cuyos usuarios tienen permitido acceder desde el paseo de Juan Carlos I, desde donde deben acceder a la calle Ebro en dirección prohibida para llegar a los garajes. Desde el Ayuntamiento aconsejan precaución a la hora de realizar la maniobra en la calle, que de forma habitual funciona con un solo carril y en una única dirección.

Este será, por el momento, el único acceso abierto para acceder a los nueve vados autorizados que existen en la vía. Todo, como informan los carteles colocados en la propia calle, hasta una nueva comunicación o hasta que las circunstancias de las obras lo permitan. Es decir, que en función de los trabajos puede que los accesos se tengan que cerrar de forma puntual, algo de lo que los propios operarios informarán a los usuarios afectados si llega a suceder. Además, se han instalado unos pequeños accesos sobre los agujeros en las aceras para permitir la entrada y salida a los portales pares, donde las zonas peatonales apenas pasan el metro de longitud.

El cierre de la vía implica también la pérdida de cuarenta plazas de estacionamiento, que estarán suprimidas durante el periodo hasta que terminen las obras. Además, los vehículos que antes realizaban el giro por la calle Ebro deberán ahora circular hasta General Shelly, que será la encargada de asumir todo el tráfico hasta la futura apertura, prevista para el mes de diciembre.

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El programa Reconstruye del Ayuntamiento de Valladolid recoge en su listado otras dos inminentes actuaciones de urbanización en el entorno de Delicias. Además de en Ebro, se espera que en septiembre inicien las obras en las calles Transición -por dos meses y en lado de los portales pares- y Cartagena -en ambas aceras-, también durante tres meses. En la primera de estas vías se reurbanizará el tramo comprendido entre Arca Real y el paseo de Arco de Ladrillo, justo en la acera opuesta a donde se ubican los cuarteles, parte que ya fue urbanizada cuando se retiraron las tapias que rodeaban el edificio militar. En ambos casos el cierre será peatonal y también para vehículos, si bien la única clausura completa será la de Cartagena, donde se ensancharán las aceras y cuyos desvíos serán por Hornija y Zapadores. En Transición solo se cerrará el tráfico en el carril de la izquierda.

Mientras, este mes se espera que terminen dos de los cortes más importantes que afectan la circulación en Valladolid. El de la calle Rondilla de Santa Teresa, también por labores de reurbanización, cuya finalización está prevista para finales de septiembre, y el de la calle Adolfo Miaja de la Muela, en Parquesol, cerrado en dirección subida al barrio desde el mes de julio por la ejecución de la red de calor sostenible.