El rector de la UVA reclama «reformas de calado» para garantizar el futuro de la enseñanza superior

En su discurso que cerrró la apertura del curso, Largo Cabrerizo aprovechó para hablar de la profunda reforma de la Ley de Universidades que en estos días discuten la Conferencia de Rectores (CRUE) y el ministerio. La educación superior necesita «una reforma de calado para dotarlas de herramientas para poder cumplir su función», reclamó. Para lograrlo, desplegó algunas claves como el diseño de una carrera académica «que haga compatibles las vías docente e investigadora», además de que sea «predecible y atractiva para retener y captar talento».

También pidió que se eliminen las tasas de reposición de profesores y hacer más flexibles los límites presupuestarios, ya que «no basta con exigencias temporales sino que hay que aportar medios». A Largo Cabrerizo tampoco le gusta la nueva propuesta ministerial de elección de rectores a través de una comisión externa y pidió que sea «lo más democrática posible».

La inauguración del curso en la UVA ararncó con la lección inaugural a cargo del catedrático emérito de la Facultad de Medicina y 'alma mater' del Instituto de Oftalmobiología Aplicada (IOBA), José Carlos Pastor. En una lección muy personal en la que repasó su trayectoria vital y su larga aventura universitaria, Pastor clamó contra «la terrible carencia de relevo generacional que afecta a casi todas las Facultades de Medicina españolas». Y lamentó que los jóvenes titulados tenga que ponerse ante «la tesitura de elegir entre integrarse en un hospital y cuidar pacientes, o incorporarse a las facultades y perder el contacto con la clínica».

El acto sirvió también para la entrega del Premio del Consejo Social 2021 de la UVA al catedrático de Microbiología, José María Eiros. Otro veterano profesor e investigador con una gran implicación en la investigación y lucha contra la covid. Tras recibir el galardón de manos del propio rector y del presidente del Consejo Social, Óscar Campillo, Eiros apenas gastó «dos minutos en tres ideas»: agracecer el premio, dedicárselo a «las pesonas que nos confían lo más preciado que tienen: sus vidas» y comprometerse a «dedicarse a continuar con su labor».

La solemne apertura del curso de la UVA contó con la presencia de representantes de todas las universiades públicas de la región, además de la Miguel de Cervantes de Valladolid, así como con el delegado del Gobierno, Javier Izquierdo, el arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez y representantes del Ayuntamiento de Valladolid y de la Junta de Castilla y León.