La reapertura del 'parking' de La Victoria tras inundarse costará 180.000 euros en obras

El haber estado anegado es solo una de la patologías que ha afectado a este cajón con 274 plazas para coches y otras quince destinadas a las motocicletas. El desuso también ha hecho mella en muchos de los elementos de este garaje. Fuentes del departamento que gestiona Manuel Saravia estiman en 180.000 euros la inversión necesaria para que pueda volver a alojar coches, aunque hasta el momento ha cumplido esta función casi de forma testimonial, ya que desde su inauguración en diciembre de 2011 solo dio cobijo a una decena de automóviles hasta que se optó por su clausura tras indemnizar a los que adquirieron plazas en él.

El área municipal contempla varias obras en este subterráneo. Entre ellas, será necesario el cambio de la maquinaria del ascensor para su puesta en marcha, la instalación de nuevas luminarias y la sustitución del cableado de toda la instalación eléctrica, la reforma de los sistemas antincendios de protección y de extracción de aire, así como la renovación de chapas dañadas en cámara bufa de muro pantalla. El proyecto también incluye la reforma de accesos exteriores, el cambio de puertas y de los detectores de humo y CO2. La obra, que tiene un plazo de ejecución previsto de tres meses y que se abordaría el próximo año, tendrá como remate el pintado interior de las tres plantas y de los elementos exteriores de la instalación municipal.

La asociación de vecinos Los Comuneros lleva años esperando una solución definitiva para que se ponga en uso un estacionamiento cuya concesión fue rescatada por el Ayuntamiento en 2016 tras entrar la constructora Teconsa en concurso de acreedores, lo que retrajo a muchos vecinos interesados en hacerse con una plaza ante la incertidumbre que generó esta situación, así como los constantes problemas que fueron apareciendo en la construcción.

La presidenta de la entidad, Teresa Sánchez, confía en que, esta vez, se llegue a buen puerto. «Seguimos en la idea de que se ponga en marcha ese plan de reapertura, porque son necesarias plazas para estacionar en esta zona del barrio», explica la portavoz. La eliminación de puestos para coches en superficie en las calles del entorno de la plaza de la Solidaridad, como consecuencia de la autorización de terrazas en espacios de aparcamiento en vías como Dársena, San Lázaro o Júpiter, está agravando un problema que se arrastra desde hace años en un barrio donde buena parte de los edificios residenciales carecen de cocheras. «Muchos vecinos están dejándolos en el aparcamiento del centro de salud, pero está en el Paseo del Jardín Botánico y queda alejado del centro del barrio», explica Teresa Sánchez.

La fórmula por la que apuestan los vecinos para recuperar el uso de este aparcamiento gafado desde su estreno sería la del alquiler al tratarse de un barrio popular cuyos residentes tampoco andan sobrados, aunque se pudieran vender en propiedad algunas plazas. En el año 2011, por la concesión de un espacio para un turismo a cincuenta años se pedían entre 14.400 y 15.600 euros. Esos precios y la fórmula de concesión a medio siglo retrajeron a los potenciales clientes y dejaron la ocupación en mínimos. Con Antonio Gato en la Concejalía de Hacienda, se encargó a Nuve Consulting un estudio sobre la oferta en La Victoria. La empresa asesora concluyó que el precio máximo que podría pedirse por una plaza en propiedad serían 7.302 euros. Era el coste de mercado en el entorno, donde las dimensiones de los espacios en venta eran mucho más grandes –entre 12 y 20 metros cuadrados– frente a los 10 de media en el público. El mismo informe abría la posibilidad del alquiler que, para ser competitivo en la zona, debería de fijarse en 36,8 euros mensuales (441 al año).

Este estudio podría servir de base para la decisión definitiva que adopte el equipo de gobierno municipal. En este caso, están implicadas, además de Urbanismo, encargada de la redacción y licitación del proyecto de reforma, las concejalías de Planificación y Movilidad.

Primero se quiere acometer la reparación de todos los elementos dañados y más tarde se diseñará la fórmula para su reapertura y posterior gestión, que podría recaer en la compañía Auvasa al haber ampliado su objeto para encargarse, entre otros servicios, de los aparcamientos públicos.