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El alcalde de Valladolid aseguró este miércoles rotundo que él se paga sus vacaciones y se negó a confirmar, como acreditan las fotografías, si compartió dos días en un yate el pasado mes de septiembre con su «amigo» Sergio Zaitegui, el adjudicatario en mayo de un contrato municipal urgente de equipos de protección contra la covid por importe de 195.178 euros. «De mi vida privada no hablo», zanjó en varias ocasiones, al tiempo que calificó de «falsa» la información en la que se asegura que su estancia en Ibiza y Formentera con su hija mayor fue abonada por este empresario vasco.
Puente, quien respondió a las preguntas sobre este espinoso asunto antes de visitar la recién reformada calle Majuelos, en el barrio de Puente Duero, recordó que el PP, al igual que el resto de grupos municipales, dio el visto bueno a esa compra y acusó de «deslealtad» a la presidenta de la formación, Pilar del Olmo. El regidor admitió que conoce a Zaitegui, con quien mantiene una relación de amistad, y argumentó que por eso tiró de él para comprar los equipos de protección. No había casi material en el mercado y era el momento más duro de la pandemia. Zaitegui estaba gestionando 'epis' para el Gobierno vasco y fue él quien hizo el «favor» al Ayuntamiento de Valladolid, según acotó el socialista.
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El primer edil, quien visiblemente azorado llegó a llamar «pesado» al periodista de 'Ok diario' ante sus insistentes preguntas, mostró su extrañeza con la «concertación» entre el PP y este medio digital para hacer pública la información en un día de Pleno. Puente considera que la responsable popular «es una persona sin principios y sin escrúpulos» al no reconocer que tenía conocimiento de esa compra de material contra el coronavirus.
El regidor recalcó que no tiene ninguna razón para dimitir, como le ha solicitado Del Olmo. «No he cometido ningún tipo de irregularidad y mi actuación no tiene nada de reprochable», remachó. Puente insistió en que, desde el primer momento, trasladó a los grupos que el dueño de la compañía Zaiglobal era amigo suyo, lo que permitió conseguir el pedido a «muy buen precio».
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La presidenta del PP en el Ayuntamiento de Valladolid, Pilar del Olmo, negó, en un rueda de prensa convocada con urgencia inmediatamente después de la comparecencia del alcalde, que Puente les comunicara que tenía una relación de amistad con Sergio Zaitegui. «Nos dijo que se trataba de un empresario vasco, nada más», matizaba la política popular.
En su opinión, el contrato no es lo que cuestiona su partido, «sino que la persona al que se le adjudicó le haya pagado las vacaciones». «Las fotos en el yate no las ha tomado el PP y seguimos sin saber si le han pagado esas vacaciones; o ofrece explicaciones o tiene que dimitir», reiteró. El PP pone en cuestión también que Puente se fuera a las Baleares «en el peor momento de la pandemia» y faltara a una reunión de alcaldes, convocada por el presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, a la que asistió Manuel Saravia. «¿Eso es lo que le importaba Valladolid?», se preguntó Del Olmo. La cabeza de lista del PP considera que «las 24 horas que Puente ha estado en el rincón de pensar» no le han servido para ofrecer una explicación convincente, además de apuntar que se le vio «desencajado» en el Pleno. «Desde hace un tiempo está nervioso, muy inseguro, como ido», describió.
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El portavoz de Ciudadanos, Martín Fernández Antolín, mostró, en un comunicado enviado desde la Unidad de Medios de Comunicación del Ayuntamiento y no desde su grupo, su extrañeza por la vinculación que la portavoz de PP intentó establecer el martes entre una noticia y un hecho «del que los portavoces de todos los grupos municipales conocíamos desde que celebrábamos reuniones telemáticas durante el confinamiento», dijo. «La escasez de este material en el mercado nos llevó a todos, en aquel tiempo, a buscar alternativas que viniesen a paliar la situación y los que tenían contactos los pusieron a disposición del Ayuntamiento; el alcalde como uno más», señala en ese texto.
Según corrobora Fernández Antolín, «su contacto era uno más de los que se ponía sobre la mesa y, en aquel momento, se confió en las garantías que nos ofrecía una empresa que estaba trabajando ya con el Gobierno Vasco en la provisión de material. Lejos de ocultarlo, el alcalde habló explícitamente de que era un amigo suyo, no solo alguien a quien conocía, sino a quien podía dirigirse con las máximas garantías cuando se estaban produciendo, y no podemos olvidarlo, constantes noticias de estafas en la adquisición de material».
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El concejal del PP José Antonio de Santiago-Juárez criticaba en su cuenta de Twitter este capote que el portavoz de Ciudadanos echaba al alcalde. «Quizás @martinjfernande también estuvo de polizón en el yate???? No hablamos de contrato . Estamos hablando de posibles vacaciones pagadas a todo lujo», escribía el afilado político del PP. Y Martín Fernández le contestaba: «Amigo @jadesantiagovll, ¿ha leído usted en mis declaraciones algo sobre las vacaciones? Pregunte a la Sra. del Olmo por las reuniones de los portavoces durante el confinamiento. Les veo faltos de comunicación...»
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