Valladolid

El PSOE alerta de que PP y Vox «dan pasos para privatizar» el agua y el Gobierno lo niega

El gobierno municipal, por boca del concejal Alejandro García Pellitero, considera que las acusaciones son totalmente infundadas. «Los cambios que se hacen son por un interés público para que podamos acometer limpiezas y mantenimientos de los cauces de los ríos y no tener que externalizar estos servicios», apuntaba el edil al tiempo que confirmaba que la empresa seguirá siendo pública

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Herrero ha expuesto que PP y Vox planteaban la modificación del artículo 17 para posibilitar el traspaso del 80% de los remanentes de Aquavall al Ayuntamiento de Valladolid. Para los socialistas es «intolerable que se contemple esta posibilidad, porque los beneficios de la empresa deben destinarse íntegramente a inversiones para mejorar las redes y el servicio y en ningún caso desviarse a otros fines».

Otro de los puntos que han sembrado la inquietud en el PSOE es el cambio en el artículo 14, encaminado a la contratación de un gerente con grado de alto cargo. Herrero interpreta este acuerdo frustrado como un «intento de preparar el terreno para el fichaje de un directivo del lobby del agua».

«Han dejado huella de sus intenciones, y huella por escrito porque todo está en el expediente. El paso que han dado hoy PP y Vox apartando a técnicos municipales, que son expertos e independientes, es un acuerdo para laminar su presencia en el consejo de administración de la empresa pública, pero ha quedado en evidencia que la pretensión del equipo de gobierno de Carnero era aún más ambiciosa porque han intentado otras modificaciones propias de los procesos de privatización», subrayaba. Esos tres técnicos que salen del órgano serán sustituidos por un representante de la CEOE (que «recurrió la remunicipalización»), otro de la Universidad de Valladolid y un tercero del Consejo Social de la ciudad.

«Es un aviso a navegantes del actual equipo de gobierno. Hay que decir que nosotros, en el año 2017, heredamos una gestión privada, con un déficit de inversión de 96 millones de euros a lo largo de veinte años», apuntó el portavoz. En su opinión, se hizo «una remunicipalización ejemplar, modelo en toda España», frente «a todo tipo de presiones del lobby del agua y también frente a la oposición de la derecha». El socialista recordó que se pronosticaron riesgos financieros y problemas económicos de todo tipo.

«Ahora quieren meter la mano en el cajón de los riesgos económicos que decían que había. También que iba a haber inseguridad jurídica para los trabajadores y nada de eso sucedió. El caso de Aquavall es un caso de éxito, con diez sentencias judiciales ganadas, una empresa rentable, una empresa saneada», concluyó el portavoz