Villafrechós cierra su año taurino con un multitudinario encierro campero

El plato fuerte de la tarde era el encierro campero, en el que se soltaron de forma escalonada en el camino de la Atalaya, entre las carreteras de Santa Eufemia y Cabreros, dos toros (Cubano, de Pilar Población, y Bonacible, de Núñez de Tarifa) y una vaca (Capitana, de Aurelio Hernando), que dieron buen juego a los caballistas, pero también a los aficionados que se acercaron a pie a las reses. Como viene siendo habitual, el encierro fue seguido por cientos de vecinos y visitantes en los más variados vehículos. El buen ambiente festivo continuó a última hora de tarde con la actuación flamenca de Los Varis y por la noche con el espectáculo Selvátika, que congregó a cientos de personas de toda la comarca.

El presidente de la asociación Taurofrechós, Emilio Espeso, mostró su satisfacción por el éxito del festejo, a la vez que agradeció al casi medio centenar de empresas patrocinadoras del festejo y a todos los socios que han colaborado en su organización. Espeso señaló que el objetivo principal es «seguir promoviendo la fiesta del toro en una comarca en la que está muy arraigada».

Este encierro por el campo, el último de la comarca terracampina, pone fin al calendario de festejos taurino de Villafrechós, en el que destacan las sueltas de la vaca enmaromada y el encierro por el campo de las fiestas de la Virgen de Cabo de septiembre y el Toro del Cotillón, al inicio de año, aunque sin enmaromar, singularidad que solo se puede dar durante los festejos de la patrona por su especial declaración de Espectáculo Taurino Tradicional.