Vecinos de Villanueva de los Caballeros señalizan los caminos y les ponen código QR

La iniciativa, con el sugerente nombre de 'Por el camino me entretengo', ha sido llevada a cabo por la Asociación Cultural Soperones VdlC (iniciales de la localidad) a raíz de las propuestas de algunos de sus miembros y «de la necesidad de dinamizar a sus socios en un periodo en el que las actividades conjuntas están muy limitadas por la normativa que trata de contener la expansión de la covid», según expresó el tesorero de la asociación, Carlos Hernández, quien explicó que «son caminos identificables por los agricultores que a diario mueven sus aperos por nuestra localidad, pero desconocidos en gran parte para los hijos del pueblo, veraneantes y amigos que pasan parte de su tiempo en nuestra localidad». Por eso, surgió la idea de señalizar los caminos «para que todos compartamos ese conocimiento y luego podamos explicar que se nos ha cruzado una pareja de avutardas en el camino de Carrilones cerca de Sotámbano, o que hemos visto a una grulla gris sobre el Sequillo desde el camino de Costarrolla, de tal forma que todos identifiquemos esos pagos».

Lo primero fue identificar los caminos que iban a ser señalizados, a la vez que se estudió la mejor ubicación de los carteles. Además, se llevó a cabo una labor de búsqueda de información. La siguiente fase fue un taller de pintura en el que, con las oportunas normas de seguridad, los carteles fueron pintados por mayores y pequeños.

A cada cartel, que fue barnizado para ser protegido de las inclemencias climáticas, se le incorporó un código QR que permita a los paseantes acceder a una pequeña explicación de las características del camino, además de un mapa con su ubicación en el término municipal.

Tras la realización de las hoyas, los carteles fueron colocados por distintas cuadrillas de vecinos en las ubicaciones escogidas, en una jornada en la que no faltó la degustación de los chorizos y salchichones que se realizaron el último invierno dentro del taller 'Dale a la manivela', con la oportunas normas de distanciamiento. Los carteles se han colocado en los caminos que parten del pueblo y se dirigen a alguna localidad cercana.

En una segunda fase se identificarán aquellos caminos más alejados del pueblo, especialmente los que se encuentran al otro lado de la autovía A-6. Una de las partes más importantes e iniciales del proyecto se centró, con la colaboración del Ayuntamiento y algunas madres y abuelas, en reunir a los más pequeños del pueblo para construir un camino propio «en el que se pudiesen reencontrar con sus amigos después de tantos meses de confinamiento».

Los niños pintaron piedras, según sus propios criterios, y todas ellas se ubicaron en el parque para que se puedan ir incorporando otras piedras pintadas que «formen ese camino de amistad y felicidad que queremos construir entre todos».

De hecho, esta actividad que se celebró en julio se llamó Creando el camino de la felicidad, pues ese es su objetivo, «incluso en tiempos en los que los talleres infantiles hemos de hacerlos con mascarillas y distancia de seguridad». Además, los niños dieron una lección de compromiso decidiendo por su cuenta dibujar una serie de carteles en defensa del medio ambiente y del consumo responsable de agua