Una tromba de agua anega Aguilar de Campos

Una tromba de agua anegó el lunes por la tarde la localidad de Aguilar de Campos. En total fueron cerca de 40 litros de agua y granizo los que cayeron por metro cuadrado durante algo más de 20 minutos, lo que hizo que se inundaran calles, plazas, carreteras, cunetas, caminos y tierras de labor, a la vez que se desbordasen los arroyos del término municipal. Esta agua torrencial se unió a la caída durante unas tres horas, aunque ya con más normalidad.

De especial fuerza fue el agua que llegaba con lodo de la parte más alta del pueblo, donde se encuentran los restos del castillo y la iglesia de San Andrés, y de los caminos que llegan de Berrueces y Palazuelo de Vedija. Desde el Ayuntamiento, con la intervención de algunos vecinos, se procedió a levantar las alcantarillas para que pudiera entrar el agua con más facilidad. El alcalde del pueblo, José Luis Collantes, destacó la fuerza de la tromba señalando que «parecía que no hubiera cielo». Tras el aviso por parte del Ayuntamiento, operarios de la Diputación de Valladolid procedieron ayer por la mañana a la limpieza de la carretera VP-5506 y la travesía del pueblo.

Por suerte, los cultivos no se han visto afectados por las aguas torrenciales, a excepción del daño que sí ha causado a las tierras que estaban preparadas para la siembra del girasol. La vecina Marivi Blanco, que tiene su casa a la entrada del pueblo, manifestó que habían pasado «un susto muy grande», ya que «veíamos cómo el agua venía por todos los lados», quedando toda la casa rodeada de agua, aunque «sin llegar a entrar al interior». La vecina alentó a la Diputación a limpiar las cunetas con más frecuencia.