Tres encierros, comida popular y verbena en honor a San Jerónimo en Olmedo

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El encierro campero, al contrario que el anterior, fue exitoso, pues entraron en el recorrido urbano y finalmente a los corrales de la plaza de toros tres de los cuatro utreros, ya que uno se dio vuelta junto a la parada de cabestros. El primero, a los 18 minutos de la suelta tras varios intentos frustrados. Los dos siguientes, junto con los mansos lo hacían cuatro minutos después. Fue en este arreón de entrada al Paseo de San Juan cuando se produjo un percance que obligó a actuar a los servicios de la Cruz Roja que se encontraban en la zona. Una persona de avanzada edad que trataba de refugiarse en los barrotes del vallado sufrió una caída, provocándose varios golpes y rozaduras en la cara.

Al cuarto novillo, tras varios intentos, finalmente resultó imposible reconducirlo hacia el embudo y lograron reducirlo y encerrarlo para ser llevado hasta los corrales de la plaza de toros.

Además de los citados festejos taurinos, la tercera jornada festiva de la villa del Caballero se completó por la mañana con un gran parque infantil de atracciones para los más pequeños en el parque Lope de Vega, donde a primera hora de la tarde cientos de peñistas, grupos de amigos y familias se reunieron para degustar una ración paella o un suculento guiso de carne con patatas, en la denominada 'comida de la amistad'. El broche a la jornada para honrar a San Jerónimo lo ponía, una vez concluido el encierro nocturno, la orquesta pontevedresa Tango.