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Nadie solo en Nochebuena es el lema con el que la localidad de Santa Eufemia del Arroyo celebró, por segundo año consecutivo, la cena de Nochebuena con el fin de que nadie estuviera solo en una noche tan emotiva. El propio cartel anunciador decía « ... si no quieres cenar solo, disfrutemos de la cena de Nochebuena juntos en la terraza del bar, unamos el espíritu de Santa Eufemia con el navideño y creemos una noche especial».
Cerca de una veintena de vecinos se dieron cita en la amplia terraza del bar del pueblo, que fue cubierta hace tres años y en la que se instaló calefacción. Una iniciativa que promovió el Ayuntamiento, cuya teniente de alcalde, Lydia Uña, quien asistió a la cena con su familia, explicó que «es una noche para no sentir la soledad, para arroparnos». También recordó que en «estos días las familias se dividen y esta cena es una manera de que muchas personas no se vieran solas». Lo mejor es que «al final es una reunión familiar un poco más amplia».
De nuevo, cada uno de los asistentes aportó viandas que formaron parte de un amplio y completo menú con patés, quesos, canapés y otros entrantes, bueyes de mar y lechazo asado al estilo castellano, siendo los postres sabrosas tartas que aportó Magdalena, una vallisoletana que al saber de la iniciativa el año pasado por El Norte de Castilla se quiso sumar a la cena, a la que no faltaron Javi y su hija, Ariadna, de Canarias, que viven en el pueblo, y que llevaron las patatas al mojo picón.
Este pequeño pueblo, como en otras ocasiones, es pionero en este tipo de iniciativas que buscan la cohesión y bienestar de los vecinos. La propia teniente de alcalde mostró el orgullo de todo el pueblo de esta cena de Nochebuena, de la que de nuevo esperó que «sea exportable a otras localidades para que ninguna Navidad nadie este solo en solo en su casa».
Detrás de ese deseo de hacer más atractivas las fiestas navideñas en esta pequeña localidad terracampina se encuentran también las actividades de montar el belén o adornar el árbol de Navidad, sin que falten jugar al bingo, con un jamón de premio, o degustar un sabroso chocolate. La iniciativa ha sido tan bien acogida que ya se está organizando la cena de Nochevieja, en la que, como otros años, junto a muchos más vecinos, no faltará el emotivo momento de recibir el año nuevo con el encendido y suelta de farolillos de la suerte, que, con sus luces, llenarán el cielo de la localidad.
La suelta de los farolillos estará precedida por la bienvenida del año nuevo con la invitación a las tradicionales uvas comidas al son de las 12 campanadas y el brindis con champan. Tras la suelta de los farolillos, el bar del pueblo permanecerá abierto para quien quiera celebrar la llegada del año en un ambiente festivo con música. El 5 de enero la localidad recibirá con gran emoción la llegada de los Reyes Magos.
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