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«Frente al periodismo del relato, necesitamos el periodismo de los hechos. Frente al periodismo de la posverdad, creemos en el periodismo del análisis. Y frente al periodismo de las emociones primarias diseñadas en el ala oeste de cualquier gabinete, preferimos el periodismo de las ... emociones profundas nacidas de las historias de personas con nombres y apellidos», dijo el presidente de la Diputación, durante la entrega de los 24º Premios de Periodismo Provincia de Valladolid, que ha tenido lugar hoy en el castillo de Fuensaldaña.
En su intervención, y tras poner en valor los trabajos premiados por el jurado de esta edición, el presidente ha criticado que «hoy, la lucha partidista se centra especialmente en colocar 'el relato', lo que no deja de ser una parte deformada de la realidad. Da igual que hablemos de la gestión de la crisis sanitaria o de la corrupción interna de los partidos (de todos los partidos). Da lo mismo si nos referimos a la modificación del andamiaje constitucional o a la gestión de la movilidad en nuestras ciudades. No importan los hechos, importa quién gana 'el relato'».
En este sentido, ha señalado que ello quedaría en mera anécdota «si no fuera porque cada vez hay más medios dispuestos a ayudar a colocar ese relato construido con hechos alternativos», y recordó que sin periodismo no hay democracia: «Lo dicen los colegios y las asociaciones profesionales, y estoy completamente de acuerdo con esa afirmación». De ahí que asegurara que hoy más que nunca se necesita un «Periodismo con mayúsculas» que, a su juicio, nunca debe ser aséptico, pero sí honesto y, sobre todo, independiente, ya que de lo contrario sería una «farsa».
Y en este marco de historias reales, del día a día, sin filtros ni medias verdades, sino tal como son, se encuentra el trabajo 'Oficios en el olvido' que han realizado conjuntamente Laura Negro y Rodrigo Ucero, de El Norte de Castilla, y que les ha hecho valedores del Premio de Periodismo Provincia de Valladolid, dotado con 5.000 euros. Se trata de una serie de siete reportajes en la que se combina la calidad del texto sencillo, preciso, ágil y muy descriptivo, que refleja actividades tradicionales adaptadas a una nueva realidad imprescindible para el mantenimiento y futuro de nuestros pueblos, y el uso de diferentes soportes periodísticos que se unen para complementarse en un único trabajo.
«Estoy muy feliz por recibir este premio que reconoce nuestro trabajo y por ello quiero expresar mi gratitud a la Diputación, por su continua apuesta por nuestros pueblos y sus recursos. Pero, sobre todo, por instituir estos premios que sirven para reconocer la importancia del periodismo local y a todos los profesionales que nos dedicamos a la noble tarea de informar», dijo emocionada Laura Negro, a quien le resulta «increíble que te premien por hacer algo que te encanta».
Y en sus extensivos agradecimientos no faltó Jesús, su marido; sus tres hijos, Luis, Irene y Ángela, «a los que mi trabajo muchas veces les roba más horas de la cuenta»; sus padres, «por confiar siempre en mi», su hermana, María, «que es una magnífica periodista»; y Luisi, «que siempre está ahí».
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Y no se olvidó, ni mucho menos, del que es su periódico, El Norte de Castilla, de sus directores y compañeros, «por confiar en mí». Pero si por algo le hacía ilusión este premio, es por compartirlo con Rodrigo Ucero, autor de los vídeos que se incluyen en el trabajo. «Gracias compañero por no decir nunca que no a ninguna de mis locas propuestas», le dijo.
Y estas palabras de Laura tuvieron respuesta por parte de Rodrigo, quien calificó a su compañera de premio como una «extraordinaria periodista de gran corazón».
Tras dar las gracias a los convocantes, calificó el premio de 'sanador', «porque a veces las cosas llegan en el momento preciso, por diversas circunstancias, y entre otras cosas, lo cierto es que el día anterior a la llamada que anunciaba este galardón mi mujer perdía a su tío como consecuencia de esta dichosa pandemia, sirva como homenaje a él y a todos los que han fallecido».
«Me gustaría dar las gracias también a mi casa, a El Norte de Castilla, y a todos mis compañeros por dejarme contar historias maravillosas a diario... y a mi familia, a mis padres por dejarme cumplir mis sueños y a mi mujer y a mis hijos, Santiago y Gabriel por hacerlos realidad».
Junto a ellos, Carlos Raúl Martínez logró el Accésit al Premio de Periodismo, dotado con 1.000 euros, por su serie de reportajes 'Historias de cantera', emitidos a través de Radio Valladolid de la cadena SER. Por su parte, Jonathan Tajes recibió el Premio de Fotografía Luis Laforga, dotado con 4.000 euros, por la imagen titulada 'Trashumantes del siglo XXI' publicada en El Día de Valladolid.
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