Consulta la portada del periódico en papel
Astados que se lidiarán en Zaragoza. César Mata

Raso de Portillo debuta en plaza de primera en España

El hierro vallisoletano lidiará en una novillada picada en el ciclo de la feria de El Pilar en el coso zaragozano

Jueves, 3 de octubre 2024, 19:40

Mansamente la lluvia se va posando sobre los predios de bravo que acotan las localidades de Boecillo, La Pedraja de Portillo y Aldeamayor de San Martín. Un triángulo mágico en el que, desde hace siglos, se crían reses de lidia. El hierro de Raso de ... Portillo, cuyo nombre evoca la inmensa planicie, otrora pantanosa y salitrosa, en la que se acomodan como en un tablero de ajedrez prados y pinares. El ganadero Íñigo Gamazo, que representa a una titularidad múltiple, nos espera junto a la portera por la que se accede al cercado en el que pastan los machos.

Publicidad

Tras subir al todoterreno, nos dirigimos hacia el fondo de un amplio espacio de varias decenas de hectáreas. De terreno arenoso, sin apenas vestigios del verdor habitual. Aunque la lluvia hace que emerja un aroma de campo inconfundible. En esta casa ganadera, la más histórica por su antigüedad, están preparando el inminente embarque de sus utreros para debutar en España en una plaza de primera categoría: Zaragoza.

«Estamos muy contentos con la temporada, que nos ha llevado desde San Agustín de Guadalix hasta Peralta, donde tuvimos un éxito tremendo, con un juego extraordinario de todos los novillos. En Vic-Fezensac, que es plaza de primera en Francia también hubo algún ejemplar de nota, y además hemos ido a la feria de La Granja, así que es una campaña completa, que vamos a rematar en Mojados y con la guinda magnífica de Zaragoza, una plaza de máxima importancia», comenta con entusiasmo Íñigo Gamazo.

Casi en el límite, cerca del vallado, que permite contemplar un hato de hembras al otro lado, se encuentran, aparentemente tranquilos, pero con alguna mirada desafiante, los santacoloma de Raso de Portillo, vía Dionisio Rodríguez. «Mira, ese es Telita, el 25, que tiene unas hechuras muy de la casa, serio sin ser cornalón», indica el ganadero mientras señala a un cárdeno claro cuajado y con romana. «Además, llevamos a Caramba, el 24, y ahí tienes a Eburneo, el 38, algo tocado hacia arriba de pitones pero muy bien hecho, y al 33 Sabidillo, y el que está allí detrás, el 26, Asperillo…», expresa con evidente ilusión sobre la próxima cita, el 7 de octubre, cuando se lidiarán estas reses en el coso maño de La Misericordia.

Publicidad

Resulta curioso que una ganadería tan longeva no esté presente en plazas de mayor fuste de manera habitual, si bien, es evidente, su estirpe santacolomeña no es el mejor pasaporte para acceder a las grandes ferias, ni a los carteles con figuras, aunque, en realidad, sí podría serlo. Todo depende, como tantas cosas, del enfoque. ¿Y Valladolid?, preguntamos al criador: «Pues la verdad es que es una cita que de momento no llega pero que esperamos con mucha ilusión, siempre con atención a que las empresas se interesen por nuestros toros, que suponen un acontecimiento por su historia y un reto por su procedencia, pero no por una extrema dificultad en su lidia, porque exigen, sí, pero se les puede torear muy bien», comenta entre esperanzado y algo resignado.

En un salón campero de la finca cuelgan algunos carteles añejos de citas de Raso de Portillo en los ruedos. «Mira, este por ejemplo, de cuando lidió la ganadería en Valladolid en 1930, con Nicanor Villalta, que fue un torero aragonés muy importante», expresa Gamazo mientras señala el cartel que evidencia su vejez en su color desgastado. «Hace unos 40 años lidiamos también en Valladolid en aquellas nocturnas tan famosas de las que salieron tantos toreros famosos y que llenaban los tendidos…», completa.

Publicidad

En unas horas se embarcarán los novillos con destino a la capital maña. «Tenemos una alegría enorme, junto con responsabilidad, mucha, pero creemos que puede ser un éxito de nuestra ganadería, tan histórica y tan de Valladolid, porque además los novillos no son ni los más grandes ni los más terciados, sino los de hechuras medias más del tipo que seleccionamos, muy proporcionados en sus tercios, y con seriedad por delante sin excesos», comenta el ganadero.

Los novilleros Miguel Andrade, Bruno Aloi y el salmantino Valentín Hoyos serán quienes lidien estos utreros que se crían muy cerca de Boecillo, en donde se divisa el perfil del palacio de los Condes de Gamazo, mientras en la dirección contraria aparece, enhiesta, la silueta brumosa del castillo de Portillo. Un enclave nuclear e histórico de la cabaña brava.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad