Borrar
Los quitos de Tordehumos, con sus llamativos ponchos, hicieron sonar los almireces El Norte
Los quintos de Tordehumos y Villafrechós renuevan la tradición del Domingo Gordo

Los quintos de Tordehumos y Villafrechós renuevan la tradición del Domingo Gordo

Mientras que los ahumados golpearon los almireces para pedir para la fiesta tras la larga jornada del Día de la Leña del sábado, los fructuosos vieron como la nevada suspendía su tradicional carrera de cintas

Domingo, 2 de marzo 2025, 19:54

El domingo anterior al Miércoles de Ceniza es conocido como Domingo de Carnaval o Domingo Gordo. Un día de fiesta y celebraciones en el que hace años los mozos que cumplían 18 años eran tallados para realizar el servicio militar. La tradición se ha conservado en pueblos como Tordehumos y Villafrechós, pero ya como una fiesta de todos los jóvenes, tanto hombres y mujeres, que festejan con alegría que en el año cumplen los 18 años.

En Tordehumos, los quintos celebraron el sábado el tradicional Día de la Leña. A media mañana, los jóvenes ahumados Marko Diez, Carla Paredes, Egoitz Calvo, Sendoa Calvo, Ane Rosset y Beatriz Ribeiro, vistiendo sus llamativos ponchos de colores y montados sobre burros, partieron al monte, donde pasaron toda la jornada. Por la tarde, los quintos regresaron cargados de leña, con la que por la noche hicieron una hoguera que tuvieron que saltar por orden de fecha de nacimiento, según el naipe que llevaban en los sobreros de paja, siendo el as de oros para el mayor y el rey de ese mismo palo para el más joven. La hoguera dio paso a una larga noche de fiesta que, como es costumbre, coincidió con el baile de Carnaval.

El Domingo Gordo, por la mañana, los quintos, haciendo sonar almireces de bronce, fueron por las casas pidiendo el aguinaldo para ayudarles a pagar los gastos de la fiesta, al tiempo que pudieron degustar la típica repostería de Carnaval, las orejas y las torrijas, que amablemente fueron ofreciendo los vecinos a la quintada. A principios del mes de mayo los quintos tendrán que levantar el mayo y durante el resto del año, en todas las fiestas, tendrán que lucir el poncho de colores hasta el próximo año, cuando, en la carrera de cintas de Las Candelas, en febrero, pondrán fin a su inolvidable año de quintos. La nieve suspendió la carrera de cintas intermunicipal programada para última hora de la mañana.

En Villafrechós, los quintos de este año, Álvaro Guerra, Enya Martínez, Álvaro Justo y Hugo Barazón, vieron cómo la nevada que cayó durante todo el día suspendió la carrera de cintas que se celebra cada año en el Domingo Gordo como una tradición de gran raigambre, de ahí la gran desilusión de todos los jóvenes pues «es una vez en la vida». Sin embargo han quedado en celebrar la carrera otro día en el que, además de intentar sacar las cintas de colores, que serán un buen recuerdo de su año como quintos, cumplirán con la tradición de ofrecer una cinta especial pintada a mano a la patrona, la Virgen de Cabo, en su ermita. Además, cada uno de ellos regalará a familiares y amigos una cinta con su nombre y el presente año.

Aunque no se celebró la carrera de cintas, sí que tuvo lugar el baile de disfraces infantil, con juegos realizados por los propios quintos, con regalo incluido, y, por la noche, el de adultos, sin que faltase la cena de los quintos. Las próximas citas de estos quintos de Villafrechós serán el último día de abril, cuando por la noche levanten el mayo, y el lunes de Pentecostés, cuando instalen en la ermita un arco realizado con ramas de álamo que adornarán con naranjas, rosquillas y pañuelos y bajo el que pasarán las imágenes de la Virgen de Cabo, San Isidro y San Isidoro, antes de que se lleve a cabo la bendición de los campos.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Los quintos de Tordehumos y Villafrechós renuevan la tradición del Domingo Gordo