Precioso encierro en Medina del Campo donde los seis toros entraron en las calles

A las nueve de la mañana salían desde los corrales de la Golosa los seis toros de la ganadería de Torres Gallego de Jaén, acompañada de una manada de bueyes, saliendo cuatro toros juntos y otros dos desperdigados, pero todos controlados en todo momento.

A las 9.20 de la mañana llegaba el primer toro, qué entraba sin ningún problema en las calles, hoy repletas de público, tanto en las talanqueras como en el recorrido del encierro, donde había numerosos corredores de otras provincias y comunidades, lo que originó una carrera bonita hasta el descansadero.

Minutos después llegaban otros cuatro toros acompañados de los bueyes y en el arreón entraron tres, porque uno se giró y se dio la vuelta, momento que empitonó a dos caballos, uno que recibió un varetazo y otro con menos suerte que recibió una cornada en el costado izquierdo a la altura del brazuelo sin que revistiera mucha gravedad, siendo atendido por los servicios veterinarios.

El toro que se dio la vuelta en ese momento creó momentos de peligro en el atalancado de madera en la zona del embudo siendo controlado por los caballistas y esperando a un segundo novillo que venía por detrás, una vez se juntaron y después de esperar un breve espacio de tiempo procedió a meter en las calles pero solamente un novillo entró quedándose el otro parado en el sitio. Fue entonces donde se vivieron los momentos de más tensión y peligro, pero también donde el público disfrutó ante las impresionantes arrancadas que el novillo daba hacia los caballos, que a punta de garrocha intentaban que el toro entrase en las calles, llegando incluso a meterse por detrás de las talanqueras de madera hacia el público. La buena actuación de los caballistas hizo que el toro saliese sin ningún problema ni incidente. Los bueyes, que volvieron a salir, lo consiguieron encabestrar y meter a las calles en un bonito arreón donde otra vez los corredores que le esperaban pudieron disfrutar de una bonita carrera.

Una vez metidos en el descansadero y pasada la media hora de rigor se volvieron a soltar en la calle en una carrera bonita y limpia hasta la Plaza del Coso del arrabal donde se celebró luego una capea, con un bravo toro de Núñez del Cuvillo el primero que hizo las delicias de cortadores y maletillas, y otros tres más de diferentes ganaderías.

Con este encierro daban por finalizadas las fiestas de San Antolín 2024 con un balance en general bastante bueno tanto en la calidad del ganado como en incidentes. Solo lamentar dos cogidas por asta de toro, la más grave la de un joven que recibió tres cornadas en la capea del día 5 por la noche.

Por otro lado, en la vecina localidad de Alaejos se celebró un encierro a las 8 de la mañana de este domingo donde se soltaron cuatro novillos, y al acabar el encierro uno de los toros de la capea saltó al callejón desde parado y cogió a un vecino de Castronuño que resultó herido con fractura de una pierna.