Un pequeño pueblo de Valladolid estrena escudo tras siglos sin él

Tal y como asevera la regidora, la explicación del por qué no disponían de esta representación no tienen ningún motivo. «Llevo cinco años como alcaldesa, se planteó y no sé porque nunca hemos tenido. Supongo que se han ido dejando las cosas», indica.

El mismo fue aprobado el pasado 25 de noviembre en el Boletín Oficial de Castilla y León. «Se planteó en pleno hacer un escudo y estábamos todos de acuerdo. Entonces, mandamos hacerlo a una empresa y les dijimos que estuviera relacionado con Ventosa de la Cuesta», menciona. El diseño ha corrido a cargo del proyecto «Heráldica Popular». Así, esta nueva seña de identidad hace referencia a un personaje muy importante del pueblo, pero también a la comarca de Medina.

Esta pequeña localidad surgió como población en el marco de la Comunidad de Villa y Tierra de Medina del Campo, que estaba formada por unas setenta aldeas. Esta pertenencia finalizó en 1559 cuando, para cubrir necesidades económicas de la Corona castellana, Ventosa de la Cuesta se convirtió en señorío, que fue adquirido por Alonso González Berruguete.

Así, el importante escultor y pintor renacentista ligaba su figura a la localidad siendo el primer señor de Ventosa. Tras sus años de formación en Italia, puso en marcha un próspero taller en Valladolid que pasó a ser el principal núcleo de la creación escultórica de Castilla. En su última etapa artística la mayor parte de su obra estaba destinada a Toledo. Murió en 1561, siendo enterrado en la iglesia de Santa María de la Asunción de Ventosa de la Cuesta.

Teniendo en cuenta estas dos cuestiones históricas, el escudo refleja la vinculación con Berruguete a través de dos cinceles y un pincel, como herramientas de trabajo claves en la escultura y la pintura; mientras que la antigua pertenencia a la Comunidad de Villa y Tierra de Medina del Campo se simboliza mediante una bordura con trece bezantes.

Conforme al lenguaje propio de la heráldica la descripción del escudo es la siguiente: «En campo de púrpura, dos cinceles de oro puestos en aspa y brochante un pincel de oro. Bordura de sinople, cargada de trece bezantes de plata. Al timbre, corona real cerrada».

«Estamos muy satisfechos con el resultado y muy contentos», asegura Escalante. Misma reacción que han tenido los vecinos. «Les ha gustado bastante. Así por lo menos tenemos una referencia de Ventosa con el escudo», expresa.

Tras su aprobación, el consistorio mandó tallar el escudo en piedra; aunque, por el momento, no tienen muy claro dónde lo colocarán. «A lo mejor lo ponemos en la entrada del pueblo, justo al lado de la ermita, que hay una letras nuevas, que hemos terminado hace poco, con el nombre del municipio», señala la alcaldesa.