«Mi padre rodó El Cid como homenaje a la historia de este país»

-Háblenos de su padre y de su historia de triunfo.

-Nació en una aldea de la antigua Rusia en 1.908. Estudió economía en la Sorbona de París y a mediados de los años treinta consiguió trabajar en Hollywood como productor en grandes estudios para las compañías norteamericanas. Amaba España y decidió venirse a trabajar aquí y por ello, en Hollywood le pusieron en la lista negra. Se puede decir, que le castigaron un poco. Fue el primero que se vino, aunque luego le siguieron muchos. Al final le acabaron reconociendo su trabajo y su buen cine. Scorsese le hizo un homenaje y también recibió un Globo de Oro.

-¿Qué le hizo dejar todo para venirse a España?

-Él se consideraba europeo, se había criado en París y quería volver a Europa. Supongo que pensó que el clima y el paisaje de España, le permitirían rodar todo tipo de películas. Aquí hay desierto, montañas, playas, castillos… Todo en el mismo país. Creo que acertó.

-«El Cid», «55 días en Pekín», «Rey de Reyes», «La caída del Imperio romano» ¿Qué le contó su padre de aquellos impresionantes rodajes?

-Lo cierto es que no me contaba mucho. Yo era muy pequeña, pero sé que él estaba muy orgulloso de todo lo que hacía, de la gente con la que trabajaba y de cómo salían las cosas. Mi padre no era un productor al uso. No era de los que ponía el dinero y se olvidaba. Él se interesaba de verdad por todo lo que tenía que ver con cada una de sus películas. Le interesaban mucho los castings y aprobaba también a los actores. Cada vez que veo una de sus películas, siento orgullo, porque creo que están muy bien hechas. Me enorgullece que mi padre hiciera un trabajo tan bonito. El Cid fue muy importante para él.

-¿Cómo escogía las localizaciones para sus películas? Como, por ejemplo, Torrelobatón para El Cid

-La envergadura de las producciones era tan inmensa que, había un departamento de localizaciones, capitaneado por Johnny Cabrera, que se recorría toda España de punta a punta, haciendo fotos y presentándoselas al equipo de producción, con todos los datos necesarios para saber si eran localizaciones posibles o no, en función de las comunicaciones, hoteles, horas de luz, climatología, etc.

-Charlton Heston llevó a su hijo Fraser al rodaje del Cid en Torrelobatón. ¿Su padre también le llevó a usted?

-Mi madre me llevó un día, justamente cuando estaban filmando la muerte del Cid. Yo era muy pequeña y veía a Sofía Loren que lloraba mucho, así que yo me puse a llorar también porque un señor se había muerto varias veces. No entendía nada.

-¿Qué le atrajo de un personaje como el Cid para llevarlo al cine?

-Que era un personaje universal y muy importante en la historia de España, que era el país donde él residía. Lo hizo como homenaje a la historia de este país.

-¿Qué supuso para usted participar en el rodaje del documental «Bienvenido Mister Heston»?

-Fue fantástico. Pedro Estepa y Elena Ferrándiz, sus directores, son maravillosos. Tuvieron una gran idea al hacer esta película, que fue un gran homenaje a mi padre. Me siento muy honrada y muy agradecida por haber podido participar en él.

-¿Qué consejo le dio su padre que no se le olvida?

-Que sea siempre sincera y que lo que hago, que lo haga de verdad. Que sea agradecida y que piense en los demás, no sólo en mi misma.