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Familiares de Javier Gaizka Redondo, el guardia civil vallisoletano desaparecido el miércoles por la tarde mientras pescaba en la costa cántabra, se han desplazado a la zona en la que se le busca por tierra, mar y aire. El padre del desaparecido, que se ... llama Javier al igual que su hijo, responde así a la pregunta de si mantiene la esperanza de que se le pueda hallar con vida: «Pues no lo sé. De no haber aparecido ya... Confiemos en que aparezca».
«Están buscándole y hay un operativo montado de la Guardia Civil», explica el progenitor de este hombre de 43 años natural de Traspinedo, al que se le perdió la pista en una zona de acantilados de Arnuero mientras disfruta de su gran pasión. «La pesca le encanta, es su mayor afición», señala Javier, que sueña con que su hijo pueda volver a disfrutar de sus aparejos y su caña.
El gran dispositivo de búsqueda seguirá rastreando la zona el viernes con el objetivo de localizar al guardia civil, que está soltero, mientras sus seres queridos esperan noticias. «Solo nos queda esperar lo que nos digan», concluye con pesar este vecino de Traspinedo.
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