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El Centro de Artes Escénicas San Pedro de Olmedo, se llenaba la noche de este viernes de vecinos y una numerosa representación de la clase política local, provincial, autonómica y nacional para escuchar el tradicional anuncio de sus fiestas patronales en honor a San ... Miguel y San Jerónimo en forma de pregón a cargo de Alberto García Torés.
Pregón en el que este olmedano de nacimiento y residencia, que hace ya dos décadas decidió dar un giro a su vida cambiando un cómodo puesto de trabajo en el Registro de la Propiedad para hacerse ganadero de ovino en una explotación que hoy es pionera por su labor de investigación, desarrollo e innovación en un sector que estaba marcado por la atonía, en el que lejos de hablar de la historia de la localidad, de su patrimonio y de mil batallas que sucedieron en tiempos remotos, o de las vivencias y recuerdos que quien habla ha tenido en el lugar, centro su discurso en las olmadanas y olmednadas que llena de vida las calles del pueblo, «Por este motivo, permitidme mi osadía, pero voy a hablar de vosotros, sí de vosotros, del bien más preciado que tiene Olmedo, de su gente, sus mujeres, sus abuelos, sus padres y por supuesto, de sus hijos».
No sin antes hacer alusión a esos recuerdos de infancia referentes a estos días de fiestas, «Para mí, las fiestas son recuerdos de olores y sabores. Olor, a cuero de las riendas de mi primer caballo, 'Guerra', con el que por primera vez, disfrute de un encierro, allá por el año 1.985. Olor, al sudor de su piel al galopar al lado de la manada de toros y cabestros, subiendo hacia el embudo del encierro. Olor a pólvora, cuando finalizaban las fiestas, en la Plaza Mayor, donde nos refugiábamos de los proyectiles que caían del cielo. Yo tuve la suerte, de estar protegido en los soportales, de la mano de mi abuelo Alejandro y de mi padre Alberto. Sabores del primer beso, del beso adolescente de un amor profundo, sabor a ti, Julia».
Pero sobre todo hizo una encendida defensa de lo rural, haciendo hincapié en que los pueblos son exportadores de talento, «No sólo tenemos que pensar, lo que nuestro pueblo nos puede ofrecer, si no, lo que nosotros podemos aportar a Olmedo, tenemos que buscar la fórmula, para conseguir que nuestros hijos, puedan vivir en nuestros pueblos, porque, llamadme egoísta, pero, ¡que puede ser más bonito que poder disfrutar de tus hijos todos los días!».
Y dirigiéndose a las soberanas indico a renglón seguido, «Vosotras, nuestras queridas Reinas, vuestras madres y vuestras abuelas, sois mujeres rurales, y constituís el colectivo vital para la sostenibilidad de los entornos rurales, y en definitiva, de nuestro pueblo. Porque vosotras sois la inteligencia, la perseverancia, la sabiduría y el buen hacer de nuestros pueblos. Por este motivo, os aplaudo, y os considero uno de los mayores valores que tiene nuestro entorno rural, y os pido, que deis un paso al frente, para conseguir que nuestros pueblos rebroten de vida».
Tributando un merecido homenaje a padres y abuelos, a los que calificó como 'Héroes del siglo XXI', por todo lo que habían luchado y siguen luchando, aunque también recrimino alguno de los errores que estos han tenido para el medio rural centrándose en la frase, «Estudia, hazte un hombre de provecho y sal del pueblo, que aquí no tienes futuro». Algo que señalo se creía que hasta era cierto, «Que las gentes de los pueblos éramos de segunda, como si ser de pueblo estuviera mal visto. Cuando en realidad es todo lo contrario. Ser de pueblo, y sobre todo ser de Olmedo, es la experiencia más maravillosa, que una persona puede tener».
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Sincerándose con el auditorio al señalar que si volviera a nacer, y pudiera elegir donde hacerlo, sin duda, volvería a elegir Olmedo, «Sencillamente porque los pueblos, son un rincón en el mundo que siempre te recibe con los brazos abiertos, somos hijos de aquello que nos ha visto nacer. En Olmedo, tenemos hijos biológicos que llevan aquí toda la vida, e hijos adoptivos, que han venido para quedarse». Y volviendo a hacer defensa a ultranza de lo rural al hilo de que algunos dicen que Olmedo pertenece a esos pueblos de la España vaciada, «Nosotros tenemos que decir, que somos la España que no se puede llenar, porque siempre hay un hueco para acoger a una persona más».
Dirigiéndose nuevamente a las soberanas, Alberto García que recordó como el acto del que de él era de alguna manera protagonista tenía una especial connotación para su familia, «Ya que mi madre, Mari Carmen, fue la primera reina de las fiestas, además de reina de la provincia de Valladolid, en el año 1962. Muchos años después, en el año 1986, mi hermana Mamen, fue proclamada reina de las fiestas; y por último mi sobrina Cristina, tuvo el mismo privilegio en el año 2019», se permitió la licencia de pedir al público asistente un fuerte aplauso para todas ellas, y sobre todo para las otras dos jóvenes de las siete candidatas que este año no resultaron elegidas, «Por su valentía, por tener sus propios ideales y por no tener miedo a la derrota. Estas son las mujeres y hombres que necesitamos en nuestros pueblos, valientes, enérgicas y decididas».
Todo ello la hilo de su experiencia personal, «A que a uno le digan 'no'. Nos han dicho 'no', en todas las administraciones, tanto regionales como nacionales, en convocatorias de premios, porque, aunque muchos pensáis, que ganamos muchos premios, no es así, son más los que perdemos», pero con orgullo señalo que aunque ha costado mucho esfuerzo y trabajo, «Hemos demostrado que, en el mundo rural, en un pueblo que se llama Olmedo, y en una granja de ovino, se pueda hacer investigación, desarrollo e innovación».
Apostillando como a lo largo de estos últimos veinte años de andadura como empresario rural, ganadero, pastor o simplemente autónomo, nunca le ha faltado fuerza de voluntad, siempre ha nadado contra corriente, en busca de sus propios ideales, en la curiosidad perpetua e insaciable, en la más pura libertad individual, en el entusiasmo por todo y en crear un mundo, un ecosistema en el que animales, plantas, insectos y hombres puedan vivir conjuntamente de la forma más natural posible, «He luchado por conseguir el respecto infinito de todos ellos, en dar valor a mi querido Olmedo, al mundo rural, y hacer de un oficio, una industria rural rentable y sostenible».
Rematando su pregón, antes de los vivas de rigor a San Miguel y San Jerónimo y a Olmedo, tributando un emocionado homenaje a las cuatro mujeres las cuatro mujeres, que han influido e influyen, en esa forma de trabajar y en el ser de su persona: su abuela Carmen, su madre, su esposa y su hija Carla, sin menosprecio de su hijo Alberto, y todos aquellos que ya no están, «Que viven nuestras fiestas desde el cielo infinito y que hoy su luz se ve reflejada, en cada una de las luces que adornan nuestro querido Olmedo», y lo hizo tomando para sí la frase de Félix Rodríguez de la Fuente, «Porque los que creemos, que se puede hablar integradamente, de las estrellas y de la tierra y de los animales y del hombre, sabemos que un día, volveremos a charlar, en las infinitas y eternamente floridas, praderas de los cielos.»
Previamente al pregón tuvo lugar la acostumbrada salutación festiva al vecindario por parte del reelegido regidor Alfonso Centeno Trigos y la proclamación como Reinas de las Fiestas de las jóvenes Lucia Arroyo, Mencia Carretero, Lucia Calvo, Carolina Delgado y Raquel Carrión, que acompañadas de sus predecesoras Carla Duque, Miriam Martin, Andrea Peña, Claudia Sanz y Celia Sierra del brazo de sus respectivos quintos, llegaron en pasacalle desde la Corrala del Palacio del Caballero arropadas por la corporación municipal, familiares, amigos, 'quintos' y la banda de la Asociación Musical Villa de Olmedo.
Proclamación mediante la imposición de la correspondiente banda y entrega de un ramo de flores a los sones instrumentales del tema 'Castellana' interpretados por el cuadro de profesores de la Escuela Municipal de Música 'José Martín Salamanca'. El broche final al acto lo puso el Coro de Villa y Tierra de Olmedo con la interpretación de varias piezas.
El solemne y protocolario acto, marcó la cuenta atrás para el inicio el próximo miércoles de los festejos en honor a San Miguel y San Jerónimo, que este año volverán a tener en los encierros tradicionales al estilo de la villa, declarados Fiesta de Interés Turístico Regional, uno de sus principales atractivos. Si bien hasta entonces a lo largo de estos días se sucederán otras serie de actividades no menos interesantes tales como la Carrera de Autos-Locos que tendrá lugar este sábado o el XLIII Certamen de Pintura Rápida Villa de Olmedo Memorial Félix Arranz Pinto la jornada del domingo.
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