Secciones
Servicios
Destacamos
Los trabajos para esclarecer la muerte de Esther López, vecina de Traspinedo, han llevado a que los investigadores citaran este miércoles a declarar a su amigo Óscar S., el último que afirma haber visto con vida a la joven durante la madrugada del 13 de enero y al que las pesquisas han convertido ahora en el principal sospechoso de su desaparición.
El hombre, de 38 años y muy conocido en la localidad pese a que reside en Valladolid capital, compareció en el cuartel durante varias horas y vio cómo su vehículo fue decomisado para realizar pruebas en él en busca de pruebas de su implicación en la desaparición y muerte de Esther López. Óscar S. ha adquirido la categoría «oficial» de investigado aunque por el momento «no se ha producido ningún cambio procesal» en su situación.
Así las cosas, en este momento las dos personas sobre las que pesa la categoría de investigados son Óscar S. y Ramón G., este último detenido el 22 de enero y liberado seis días después por la jueza aunque aún pesa sobre él la prohibición de salir de España. Junto a ellos, los cuerpos policiales también siguen la pista de Carlos 'Carolo', el otro amigo de Esther que sitúa a la joven en el aparcamiento del restaurante La Maña en compañía de Óscar.
Esta es la cronología de los hechos desde la desaparición de Esther hasta la citación a Óscar S. para que declarase ante la Guardia Civil el miércoles 6 de abril.
Esther López de la Rosa acude a este bar de copas de Traspinedo, en Valladolid, con unos amigos a ver un partido de fútbol por televisión. Llevaba consigo su documentación y su teléfono móvil.
Un amigo de Esther, el último que tuvo noticias de ella, la sitúa el día 13, en la madrugada posterior al partido de fútbol, en el entorno del restaurante La Maña. El establecimiento se ubica en el cruce de entrada a Traspinedo desde la Nacional 122. Es en esta zona donde se detecta el último rastro de la señal de su teléfono móvil.
La familia de Esther López de la Rosa denunció formalmente su desaparición el lunes 17. Su padre asegura que se preocuparon desde el momento en que no regresó a casa el día 13, que durante el fin de semana estuvo a punto de ir al cuartel, pero finalmente lo pospuso hasta el lunes 17 por entender inicialmente que podía haberse marchado voluntariamente.
Fuentes de la investigación advirtieron de que los primeros indicios apuntaban a esa posible «desaparición voluntaria», pero las primeras pesquisas a cargo de la Guardia Civil resultaron infructuosas.
La plataforma SOSDesaparecidos alerta de la ausencia de Esther a través de sus redes sociales con la siguiente descripción: en el momento de su desaparición vestía un vaquero negro y una cazadora de lana. Esther tiene 35 años mide 1.65 centímetros, tiene el pelo largo y castaño y los ojos marrones.
Los vecinos de Traspinedo organizan una batida para intentar encontrar indicios sobre lo sucedido.
El padre de la mujer desaparecida muestra su preocupación y manifiesta que lo que «no le cuadra es que se separara del móvil, porque para ella era sagrado».
Más de 200 personas, escoltadas por guardias civiles y miembros de Protección Civil, peinan un nuevo área de Traspinedo, incluyendo esta vez en la búsqueda el entorno del río Duero y el canal.
Durante la noche la Guardia Civil detiene a un hombre, Ramón G., presuntamente relacionado con la desaparición. El detenido es capturado en aparente actitud de huida. Los agentes interrogan al sospechoso y registran su chalé, situado junto al restaurante La Maña.
Los efectivos de la Benemérita comienzan a rastrear los pinares de Traspinedo con un dron, que se centra en los puntos de difícil acceso que no se han podido explorar durante las batidas. En paralelo, prosigue el rastreo de la zona con perros adiestrados a cargo de más unidades de guías caninos de la Guardia Civil.
Los buzos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil se suman a las labores para intentar hallar pistas de Esther López. Rastrean el Canal del Duero y el cauce del propio río, ambos situados a menos de un kilómetro de distancia del lugar en el que fue vista por última vez la desaparecida y del chalé del sospechoso que están registrando.
Desde que se dio la voz de alarma, cinco días después de que se viera a Esther López por última vez, el mayor avance conocido en el caso es la detención de Ramón G. en la tarde del sábado 22 de enero. Al parecer, este hombre, de unos 40 años, aseguró entre contradicciones haber hablado con la mujer varios días después de que tuviera lugar su desaparición.
El detenido por la desaparición de Esther López, Ramón G., que carece de antecedentes penales, aunque sí los tiene policiales, solo reconoce en su primer contacto con su abogada que conocía a la mujer de 35 años. El sospechoso mantiene una huelga de hambre como forma de protesta por su detención.
Cerca de que se cumplan las 72 horas de detención preventiva que establece la ley, el sospechoso es trasladado a Valladolid para presentarse ante la juez. La magistrada encargada del Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid autoriza una prórroga de otros tres días de su condición de detenido, el plazo finaliza a las 9:00 del viernes 28 de enero.
Los agentes de la Guardia Civil continúan registrando el chalé en el que reside el sospechoso en un operativo sin precedentes en Valladolid que reúne a más de un centenar de agentes, incluida una unidad de élite de búsqueda con drones, cuyos efectivos rastrearon las riberas del Duero en paralelo a la búsqueda en el propio cauce a cargo de los buzos.
Los buceadores de la Guardia civil realizan una nueva búsqueda en el río Duero extendiendo, en esta ocasión, el radio de búsqueda a dos kilómetros aguas abajo de la pesquera en la que el día anterior hicieron lo propio en sentido opuesto.
«Pinta muy mal y cuanto más se alarga esto en el tiempo es peor, aunque seguimos confiando en que salte alguna prueba de una vez que permita encontrar a mi hija», deseaba este miércoles Miguel, el padre de Esther López de la Rosa, después de ser informado de que la inspección ocular del chalé del único detenido por su presunta implicación en la desaparición de su hija había concluido después de cuatro días.
Los agentes, en efecto, dan por concluido el registro del chalé. En las siguientes horas fueron determinantes los resultados de las muestras biológicas, y del resto de indicios recogidos en la casa, para intentar determinar si Esther López estuvo, o no, en la vivienda en la madrugada de su desaparición.
El otro foco de atención de la investigación se centra en paralelo en el coche de Ramón G., un BMW con el que se movía habitualmente y que también fue inspeccionado al milímetro por los agentes. Las pesquisas continúan centradas sobre el arrestado, aunque siguen abiertas otras «líneas de investigación»
El Ayuntamiento de Traspinedo convoca una concentración en apoyo a la familia de Esther López de la Rosa para el domingo 30 de enero a las 17:00 horas en la Plaza Mayor de la localidad.
La Guardia Civil organiza para el sábado 29 por la mañana otra 'macrobatida' con la asistencia de voluntarios, ampliando la zona de búsqueda. Se va a solicitar la colaboración del 112, del Ayuntamiento de Traspinedo y de la Cruz Roja.
El detenido por la desaparición de Esther López es puesto en libertad provisional. El investigado tiene la obligación de comparecer todos los días, no podrá salir de España y debe comunicar cualquier cambio de domicilio. Las actuaciones siguen declaradas secretas.
La Guardia Civil investiga a una segunda persona por la desaparición de Esther López. Se trata de uno de los varones que estuvo con la joven de Traspinedo el pasado 12 de enero.
Una multitudinaria batida centrada en el río concluye sin rastro de Esther López. La búsqueda, que se amplió hacia Villabáñez, movilizó a más de 450 voluntarios y 150 agentes de Guardia Civil, Cruz Roja y Protección Civil.
«Nos estamos dejando el alma para encontrar a Esther López», defendía la Guardia Civil. El teniente coronel, Javier Peña, aseguraba que estaban abiertas «muchas líneas de investigación«. »Seguimos recabando testimonios»
Traspinedo arropa a la familia de Esther López: «No pararemos hasta encontrarte». El pueblo se concentra el domingo 30 por la tarde en la plaza mayor para mostrar su apoyo al entorno de la joven desaparecida.
La Guardia Civil corta los accesos a Traspinedo por carretera, a la altura de la rotonda del polígono industrial Tuduero. Varios coches patrulla ocupan el cruce de la carretera que lleva a la localidad con la vía de tren de Ariza.
Se da a conocer que ha sido hallado un cuerpo que podría corresponder a la joven desaparecida. Lo encontró una persona que paseaba junto a la carretera que une Traspinedo con la carretera de Soria, a tan solo 800 metros del restaurante La Maña, donde se perdió la pista a Esther López.
La delegada del Gobierno, Virginia Barcones, detalla que a quien se ha informado en primer lugar ha sido a la familia, y expresa su confianza en la Guardia Civil para determinar los hechos y responsabilidades que se deriven de ellos.
Fuentes de la investigación confirman que se trata del cuerpo de Esther López y consideran «poco probable» que hasta la fecha haya pasado inadvertido, al tratarse de una zona peinada por las batidas. Se trabaja con la hipótesis de que el cadáver fue dejado allí horas antes de ser encontrado.
El Ayuntamiento de Traspinedo anuncia para el domingo la celebración de un pleno para decretar tres días de luto oficial.
El pueblo de Traspinedo despide a Esther con una multitudinaria concentración silenciosa. El Ayuntamiento celebra un breve pleno para decretar 3 días de luto oficial y hacer llegar a la familia todo el apoyo y cariño del pueblo.
La Policía Judicial inspecciona un BMW robado aparcado en Traspinedo desde tres semanas antes. El propietario, vecino de Viana de Cega, denunció el robo el 22 de enero y los agentes recogieron muestras por si estuviera relacionado con la desaparición de la vecina de Traspinedo.
La declaración del testigo que halló el cuerpo de Esther López sustenta la tesis de que fue 'colocado' a la vista. El testigo declaró a los agentes que había paseado exactamente por el mismo lugar casi todos los días anteriores y no había visto nada que le llamara la atención.
Fuentes próximas al caso subrayan que la joven pudo estar allí desde la madrugada de su desaparición, el 13 de enero, aunque la primera hipótesis de la Guardia Civil, «a un 99% de posibilidades», es que una o varias personas desconocidas depositaron allí el cuerpo en las horas anteriores a su hallazgo.
El primer análisis forense, a la espera de la conclusión definitiva de la autopsia, apunta a que el cuerpo de Esther López sí presenta signos de violencia y sitúa su fallecimiento en torno al día de su desaparición, en la madrugada del 13 de febrero, según revelaron fuentes de la investigación.
Traspinedo despide a Esther López sumido en el dolor y la rabia en un multitudinario funeral. Una de sus primas afirmaba: «Eras pura bondad y siempre que hablemos de ti lo haremos con una enorme sonrisa». El pueblo clama por una explicación con un «sentimiento de impotencia» de los vecinos y su «incredulidad» ante la tesis del atropello que baraja la Guardia Civil, como reconocía el alcalde Javier Fernández.
Los avances en la investigación llevan a la Guardia Civil a decomisar el vehículo de Óscar S., en el que se desplazó junto a Esther López durante la noche de su desaparición y del que, según la versión del hombre de 38 años, se apeó en el entorno del restaurante La Maña. Los agentes buscan en él indicios de la participación de este amigo de la joven en su desaparición, de la que le consideran el principal sospechoso. Óscar S. declaró durante varias horas en el cuartel durante la tarde de ese día.
El levantamiento parcial del secreto de sumario permite conocer los pormenores del informe forense. En él se confirma que Esther López, de 35 años, fue atropellada presumiblemente en la misma madrugada en que desapareció, el 13 de enero.
La investigación continúa abierta y el análisis forense no es concluyente en cuanto a si el cuerpo fue movido o pudo ser la propia víctima la que siguió su camino antes de caer desplomada. Lo que sí deja claro el informe es que la víctima no murió en el acto, ni fruto únicamente de las lesiones sufridas en el atropello, pero que, si fue movido el cuerpo, fue en un intervalo corto de tiempo desde que fue golpeada.
Las cuestiones a resolver por los investigadores continúan siendo a día de hoy si el atropello fue intencionado o fortuito y dónde se produjo. Y, en cualquiera de los dos escenarios, si el autor no fue consciente de ello o abandonó a la víctima a su suerte. Los forenses apuntan a que el cuerpo, en cualquier caso, sí permaneció en el mismo punto, a la intemperie, durante un prolongado espacio de tiempo, quizás durante los 23 días de búsqueda, dado que presentaba signos de la acción de la fauna carroñera y de las inclemencias meteorológicas.
AUX STEP FOR JS
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.