Muere Pedro Alfonso Casado, el teniente coronel de la Guardia Civil tiroteado en Santovenia

Natural de Vitoria, pero con vínculos familiares en Sahagún (León) y Mombuey (Zamora), Perico se preparó en la academia de Zaragoza, de donde salió en 1998. Uno de sus primeros destinos fueron los GAR (Grupos de Acción Rápida) para aterrizar, enseguida, en su último destino, en Valdemoro, donde ha permanecido más de veinte años liderando la Unidad Especial de Intervención (UEI). «Es un veterano y un oficial de primera línea», destacan fuentes de la Benemérita antes de incidir en que es un agente «comprometido y valiente».

Tanto es así que sus compañeros ponen de relieve que el teniente coronel es un mando que siempre «entra el primero ante cualquier intervención» y que «es de los de sígueme y no de los de vamos». Veterano de la unidad, Pedro Alfonso Casado estuvo destinado con el rango de capitán, ya en los grupos de élite de la Guardia Civil, en el País Vasco cuando la banda terrorista ETA aún estaba en activo y participó en la captura de algunos de sus integrantes. «Es un hombre aguerrido y comprometido que en este tipo de operaciones entra el primero liderando al grupo», reiteran.

Las redes sociales se han llenado en pocos minutos de mensajes de condolencia desde todos los estamentos. «Nos deja un hombre extraordinario y un mando ejemplar que siempre estuvo en primera línea de batalla al lado de los suyos», ha trasladado la asociación Jucil, en un mensaje casi idéntico al publicado por la asociación AUGC y por decenas de agentes.

El PP de Valdemoro (Madrid), donde residía la víctima, también ha lamentado su pérdida. Líderes políticos de toda España, como el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, o la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, así como desde el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid como el edil Luis Vélez han trasladado ya sus condolencias a la familia y a la Guardia Civil.

El agente, con un amplio historial de servicio en la UEI, lideraba el viernes el grupo de operaciones encargado de negociar la rendición del vecino de la calle Alfredo Martín de Santovenia, Pablo Antonio Santamaría Herranz, quien en la madrugada anterior había acabado presuntamente con la vida de un vecino del mismo bloque en el que ocurrieron los hechos con el mismo rifle con el que posteriormente disparó desde la vivienda y alcanzó en la frente al teniente coronel.

La Unidad Especial de Intervención de la Guardia Civil, 'los caras negras' por los pasamontañas que usan, desempeñan labores similares a las de los GEO de la Policía Nacional, es decir, las más difíciles y peligrosas. Sus agentes están especializados en secuestros y situaciones críticas de terrorismo, que es precisamente el motivo de la creación de esta unidad de élite integrada en la Red Atlas de Unidades Especiales de Policía Europeas, que aglutina a 34 grupos antiterroristas de 29 países.

n febrero de 1982 fue rebautizado con el nombre de Unidad Especial de Intervención y, desde entonces, ha realizado más de 375 operaciones y logrado la liberación de 563 rehenes; además de anotarse la detención de 640 personas, 141 de ellas miembros de comandos terroristas.