Muere un hombre de 71 años al golpearse después de ser atacado por un perro en Trigueros del Valle

Los hechos tuvieron lugar pasadas las dos de la tarde del sábado en una finca familiar situada en el camino del Manantial, dentro de la urbanización Pago de la Moraleja, situada a dos kilómetros del casco urbano de Trigueros del Valle, cerca de la carretera que conduce a Corcos. Allí se encontraba José Luis, un hombre de 71 años, en una finca de su propiedad que linda que otra de su hermano, a la que, al parecer, se coló el perro propiedad de un vecino. El dueño del animal avisó entonces a José Luis para pedirle que abriera la parcela de su hermano para cogerlo. Y así lo hizo. Fue entonces, según relataron ayer sus familiares, cuando el perro se abalanzó sobre el hombre y llegó a morderle en el codo. «Se tiró sobre él, le mordió en el brazo y en el pecho y le derribó», concretan sus allegados antes de añadir que la víctima se cayó de espaldas y acabó golpeándose en la nuca contra un muro de piedra. La mujer del herido, que se encontraba en su vivienda, alertó posteriormente al 112 y al lugar se desplazó también una hija del hombre, que inicialmente estaba consciente, aunque con un fuerte traumatismo en la parte posterior de la cabeza, al margen de las lesiones leves que sufrió durante el ataque del animal.

El aviso a los servicios de emergencia se produjo a las 14:15 horas y minutos después acudió a la finca del camino del Manantial una ambulancia, cuyos sanitarios trasladaron al herido al Hospital Clínico. «En ese momento estaba consciente, aunque se quejaba mucho del golpe», recuerdan los testigos. José Luis empeoraría posteriormente en el hospital, donde falleció el lunes, 48 horas después de los hechos, de los que fue informada la Guardia Civil y por los que se abrieron diligencias judiciales para determinar la posible existencia de responsabilidades penales. El cuerpo de la víctima, de hecho, fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, donde se le realizó la autopsia para determinar las causas de la muerte y el alcance de las lesiones sufridas durante el ataque del animal. La víctima fue velada posteriormente en el Tanatorio San José, donde fueron incinerados sus restos en la tarde del martes.

Sus familiares anunciaron su intención de presentar denuncia por lo ocurrido al margen de la investigación judicial en curso con el fin de «esclarecer lo ocurrido» y, sobre todo, de «evitar que algo así pueda volver a ocurrirle a otra persona». El fallecido, José Luis González, un jubilado de 71 años, estaba casado y deja tres hijos y cuatro nietos.