Los 16 mejores galgos de España se preparan para medirse en Nava del Rey

La Cuesta de los Picos será el mirador desde el que los aficionados serán testigos de los lances que brinden los mejores galgos de España. Será a partir del 13 de enero, y hasta el día 20, siempre que la meteorología no obligue a aplazar fechas.

Es la quinta vez que Nava del Rey acoge un campeonato de España. Las anteriores fueron en el año 2000, con Morix (Toledo) como campeona y Esquiva (Badajoz) como subcampeona; en 2016, cuando ganó Favorita del Maestro (Toledo) y quedó en segundo lugar Sana de Elviro (Toledo); en 2019, año en el que Pelaya de Safesa (Valladolid) se hizo con el título y Chaparra de Triki (León) logró el subcampeonato de España; y en 2022, cuando el campeonato se celebró de forma mixta con la Finca de la Piedad en Barcience (Toledo) con victoria de Rubio de Triki (León), seguido de la manchega Pícara de Morix.

Los dieciséis candidatos a la Copa de Plata de la Casa Real en el campeonato nacional que empieza el lunes vienen siendo habituales en los últimos años. En esta edición estarán presentes de nuevo todas las territoriales sin excepción, con cinco representantes de Andalucía, cuatro de Castilla-La Mancha, cuatro de Castilla y León, dos de Madrid y uno de Extremadura.

La madrileña Triana de Safesa, hija de la campeona de España en 2019 en el mismo escenario, Pelaya de Safesa, es la que más carreras ha disputado, con trece, seguida de Anita del Espolón (Castilla-La Mancha) y Lola de Aguinuñez, de Andalucía, que han alcanzado las doce.

En el otro extremo están dos ejemplares empatados a carreras, Leyenda de Retumba (Castilla y León) y Niña de Carranque (Castilla-La Mancha), que solo han disputado seis en total –muy poco bagaje para el Nacional– y a las que el destino ha emparejado, por lo que no hay disculpa posible. La primera porque no hubo que disputar la final y la segunda porque ha sido repescada en el grupo III de Castilla-La Mancha, al pararse los dos finalistas.

Hay que destacar que la extremeña Resaca de el Boto es la única que ha tenido que disputar una fase previa antes de las previas de octavos, por lo que ha tenido que ganar a seis rivales y no a cinco, como el resto de ejemplares que van al Nacional.

Y de nuevo este año, a dos representantes de Castilla y León son a las que más las han durado las liebres. La abulense Esquima de Jimena, con un minuto y 36 segundos, seguida de la vallisoletana Rita de Tizona, con un minuto y 32 segundos.

En el otro extremo está Rumba, una perra andaluza ganadora del Grupo III de su comunidad que, curiosamente no aporta afijo de criador y al que las libres le durán de media tan solo 58 segundos. Les siguen dos galgas a las que el azar ha juntado en la primera collera. Se trata de Roca de Martos (Andalucía) y Aitana de Hermanos Bravo (Castilla-La Mancha), las dos con un minuto y siete segundos.

Las favoritas para esta edición, segun una encuesta de la Federación Española de Galgos (FEG), son Rita de Tizona, Roca de Martos y Yenka de Kade, con lo cual hay dos perras castellanas favoritas y una andaluza, aunque el desenlace siempre es incierto, porque en los resultados influye mucho la situación en que se encuentren ese día los perros, el tiempo y, como en toda competición, también la suerte.