El claustro del convento de San Pablo de Peñafiel acogió este sábado el primer salón internacional de vinos, una propuesta que nace con el fin asentarse en el calendario de eventos vitivinícolas de la localidad y con el que se busca dar visibilidad a un ... tipo de vinos en los que hay una mínima intervención, utilizando la viticultura ecológica y una vinificación también sin productos químicos para su obtención.
Publicidad
Organizado por el viticultor y bodeguero Alfredo Maestro y por el sumiller José Antonio Ojosnegros, 'Vino Vivo Wine Festival' cerró sus puertas cosechando un gran éxito, tanto de público como de expositores. En total, fueron 75 bodegas las que participaron en esta primera entrega, que ofrecieron la posibilidad de catar hasta 300 vinos procedentes tanto de bodegas de toda España como de países como Francia, Italia, Portugal o Georgia. En cuanto al aforo, el número de asistentes alcanzó el medio millar.
En el claustro de San Pablo se dieron cita consumidores, profesionales del sector de la hostelería, sumilleres y distribuidores, así como prescriptores, quienes pudieron encontrar diferentes interpretaciones del 'terroir' en vinos elaborados bajo la premisa de la sostenibilidad y el cuidado del medio ambiente, unos vinos que marcan tendencia en la actualidad.
Alfredo Maestro mostró su satisfacción por la respuesta a esta primera edición. «Satisfecho al 200%», señaló poco antes de clausurarse el salón. Asimismo, explicó que se trata de «un evento que se merece Peñafiel, en particular, y la Ribera del Duero, en general. Creemos que hemos venido para quedarnos», afirmó, a modo de balance.
Publicidad
Su compañero en esta nueva aventura, José Antonio Ojosnegros, destacó que «la afluencia de público profesional ha alcanzado el 50%», lo que le llevó a concluir que se trata de un iniciativa que ha demostrado «su poder de acción de compra». «Hablamos de vinos de pequeñas elaboraciones, un producto cuya trazabilidad es del viticultor en todo momento, porque trabaja en la viña y en la bodega, y al final esto supone respetar el medio ambiente», argumentó Ojosnegros.
La parte de negocio resulta de interés para las bodegas participantes, pues de esta manera «pueden obtener un rédito económico y comercial al esfuerzo que hacen viniendo de toda España y de fuera de ella, que el esfuerzo que hacen se vea revertido», reflejó Maestro, quien, además, remarcó la internacionalización del salón, «bodegas internacionales y del país que se puedan ver representadas también en esta milla de oro del vino» que es como se conoce a la zona vitivinícola en la que se ubica la localidad vallisoletana.
Publicidad
Sobre los bodegueros asistentes, Maestro subrayó que «se trata de una serie de elaboradores que jamás podrían ir a una feria convencional y tradicional, ferias ya en extinción, y que aquí les damos la oportunidad de mostrar sus trabajos, reales y auténticos, vinos vivos que vienen en línea directa de la tierra a la copa. El aire fresco que necesita esta zona», concluyó el organizador.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.