Secciones
Servicios
Destacamos
Desde este martes 3 de septiembre, la Plaza de Toros de Medina del Campo luce una nueva placa conmemorativa en el patio de cuadrillas. Junto ... a las ya existentes del 50 aniversario de la creación del edificio; la dedicada a Manuel Casares, constructor del coso; la de Manuel Sánchez Hernández, conserje y corralero desde 1959 a 1999; la de los restauradores de los tradicionales encierros; y las colocadas en memoria de los toreros medinenses Manolo Blázquez y Agustín Boya 'El Cuco', ayer por la noche la Villa de las Ferias inauguró un nuevo letrero.
En ella podía leerse «En conmemoración del 75 aniversario 1949-2024». Y es que, justo ayer, el Coso del Arrabal soplaba las velas con una gradas abarrotadas de vecinos que no quisieron perderse este momento. Justo quince minutos antes de que diera comienzo el primer encierro urbano nocturno, a las 23.30 horas, el equipo de gobierno, acompañado de los Guardeses, Damas y Guardeses de Honor salía al ruedo para llevar a cabo un acto institucional.
Entre ellos también se encontraba Mache, una vecina de Rodilana que hace 75 años presenció una de las primeras corridas que se desarrollaron en Medina del Campo. «Tenía dieciséis años. Mi padre siempre cogía un abono para tres. Mis padres venían siempre a las corridas y una hija venía cada día», rememoraba. «Con cada entrada te daban una almohadilla, eran negras, me acuerdo perfectamente», señalaba la mujer. Aquel día, uno de los toreros «lo debió de hacer muy mal», asegura, y el público comenzó a lanzarle los cojines. «Tuvo que salir la Guardia Civil y eso me impresionó mucho», comenta.
Desde entonces, Mache ha acudido en multitud de veces a la Plaza de Toros de la villa, pero este 3 de septiembre era una ocasión más especial. «A mi padre le gustaban mucho los toros. Hemos venido a muchas corridas. El lunes estuve aquí y lo pasé muy bien», menciona; pues el 2 de septiembre Diego Ventura, Marco Pérez y Cayetano pisaron el ruedo medinense.
Junto a ella, también se encontraba Teresa Casares, hija del empresario local, y creador de la plaza, Manuel Casares Ramos; quien manifiesto «estar encantada» de participar en el acto. El regidor, Guzmán Gómez, hizo entrega de dos ramos de flores a ambas protagonistas y cedió la palabra a Pedro Casares, nieto del fundador.
«Alcalde, te quiero dar las gracias por lo bien que tienes conservada la plaza; a ti y a todo tu grupo de gobierno, a la corporación municipal y, especialmente, a dos concejales que han estado realizando todo esto, que son Alberto Amigo y Nadia González», enunciaba Casares. De parte de toda la familia, Pedro mostró su deseo por presentar el centenario del coso y «que las generaciones que nos van a seguir puedan celebrarlo».
Por su parte, Gómez, agradeció la familia Casares «la generosidad que lleva teniendo durante estos 75 años y la que tuvo en su día construyendo la plaza». Pero también quiso dar las gracias a «todas las personas y asociaciones que han hecho posible este evento»; además de la familia Blázquez y a Domingo Nieto, por la cesión piezas para el recién inaugurado Museo Taurino.
Desde el ayuntamiento de Medina del Campo cercioraron que la conservación del Coso del Arrabal «es importantísima» y, por tanto, mostraron su «compromiso por seguir cuidándola y seguir manteniendo nuestras tradiciones y nuestra cultura», puntuaba el primer edil.
Tras ello, Gómez se desplazó junto a Teresa Casares hasta el patio de cuadrillas para desvelar la nueva placa conmemorativa que lucirá a partir de ahora la Plaza de Toros de la Villa de las Ferias.
Su primera piedra se colocó el 12 de octubre de 1948, pero no fue hasta el 1 de noviembre cuando dieron comienzo las obras. En apenas nueve meses, Manuel Casares levantaba un imponente edificio que se inauguraba el 3 de septiembre de 1949. Aquel día, Domingo Ortega, Pepe Luis Vázquez, quien sustituyó a Agustín Parra Parrita, cogido el día antes en Requena, y Manolo González, lidiaron un encierro de Samuel Hermanos. El primer toro que pisó este recinto taurino fue 'Andarríos', un ejemplar colorado ojo de perdiz.
Al día siguiente se lidiaron ejemplares del mismo hierro y actuaron los novilleros Calerito, Miguel Báez Litri y Antonio Ordóñez. Finalmente, el 8 de septiembre de 1949 salieron al ruedo tres novillos de Molero, otros tres de Flores Albarrán y otro de Esteban González para los toreros Rafael Ortega, quien sustituyó a Antonio Ordóñez, El Niño de la Isla y Litri, y para el rejoneador Ángel Peralta. Además, el cartel inaugural se completó con dos espectáculos taurinos llevados a cabo por El Empastre y Galas de Arte.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.