Herido muy grave el hombre cogido por un toro en el encierro de Traspinedo

Según el parte de lesiones facilitado por el equipo médico que lo ha atendido in situ, a pocos metros de donde fue embestido por el astado -un utrero-, se trata de un «paciente con un pronóstico muy grave; tiene dos cornadas y una posible fractura de base de cráneo. Le hemos recogido en parada cardiorrespiratoria, lo hemos subimos a la UVI móvil y el equipo médico (anestesista, cirujano y enfermera) le hemos logrado sacar de la parada, trasladándole al hospital donde llegó con pulso. Le logramos sacar de la parada y al hospital llegó vivo, con pronóstico reservado». Las heridas que registra son: una cornada en el muslo y otra por debajo de la cadera, siendo el traumatismo sufrido en la cabeza «lo que más preocupa, lo que condiciona su diagnóstico».

Se desconoce la edad y la filiación, ya que esta persona no portaba documentación identificativa alguna. Se estima que puede tener entre 60 o 65 años. Sí llevaba encima las llaves del coche, las cuales fueron entregadas a la Guardia Civil para que los agentes localizaran el vehículo y comprobaran si a través de él podían identificarlo.

La atención médica fue inmediata, se prestó de manera muy rápida. Varios participantes en el encierro trasladaron al herido, inerte, hasta donde se desplazó la UVI móvil y el equipo médico, y, tras ser reanimado, fue trasladado de urgencia al Hospital Río Hortega de Valladolid donde permanece en cuidados intensivos.

El varón fue cogido por el segundo utrero que, desde uno de los cajones situados en la plaza del Rollo, fue soltado a las calles. Concretamente le prendió en la calle Mayor, a la altura de los tradicionales soportales de arquitectura popular, de columnas de madera, zapatas y bases de piedra. La res lo golpeó contra uno de los pies derechos de estos soportales.

Tras la cogida el festejo taurino se canceló momentáneamente, hasta el regreso de la UVI en la que se trasladó al herido a Valladolid. Este se retomó con la noche ya encima. Se cumplió con el trámite soltando la vaca y el buey capón que quedaban por desencajonar, los cuales apenas permanecieron unos minutos en la calle, dándose así por finalizado el encierro vespertino de este sábado. Por la mañana se celebró una capea en El Coso de la Fuentecilla, la cual discurrió sin percances y con elevada participación y público. Más público todavía por la tarde para asistir al encierro urbano, un gran ambiente, similar al de las fiestas grandes de la localidad.

Este domingo de nuevo tendrá lugar un nuevo festejo taurino, el último de estos festejos patronales. Al mediodía se rendirá culto a San Martín, con misa y procesión, y a partir de las 16:30 horas está previsto que se desarrolle un encierro urbano, el cual partirá desde el Coso de la Fuentecilla y discurrirá por diversas calles de la localidad, en un repetido trayecto de ida y vuelta, típico de las propuestas taurinas de esta localidad.