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A finales de enero del año 2017, el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, y el alcalde de Fresno el Viejo ... , Luis Miguel Muñuner, entregaban las llaves de las últimas cinco casas de las doce incluidas en el programa de alquiler social de viviendas en el medio rural en la calle San Juan Bautista. Eran viviendas unifamiliares, de 90 metros cuadrados de superficie, que los beneficiarios recibirán en régimen de alquiler –110 euros al mes– con opción a compra, durante un periodo de cinco años. Tras tres prórrogas, de un año cada una, a principios de 2025 el contrato con la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León (Somacyl) llegará a su fin y los vecinos deberán tomar una decisión: o comprarlas o abandonarlas.
Algunos de ellos ya tienen concedida la hipoteca para poder seguir viviendo en sus hogares, pero otros se encuentran aún a la espera de conocer si se la otorgarán y hay familias que aseguran no poder hacer frente a un pago de esta envergadura. Unos pocos se mudarán a otros lugares dejando atrás casi una década de vida en la localidad. «Estuvimos hablando con el Ayuntamiento en una reunión. Nos dijeron que fuéramos a hablar con Somacyl, pero no han querido atendernos. No nos dan la cara, no quieren hablar con nosotros. El Ayuntamiento habló con ellos, pero nos dijeron que no tenía solución la cosa, que ellos no pueden hacer nada», comenta uno de los vecinos afectados, que al igual que el resto explica la situación en que se encuentran pero prefiere no revelar su identidad.
Aunque eran conocedores de que este momento llegaría, afirman que no tienen dónde ir. En su caso, ha solicitado una hipoteca pero lleva varios meses esperando una respuesta. «Con una niña pequeña yo no me voy, que venga quien sea, pero yo no me voy», señala. «Estamos muy preocupados y muy mal, porque con una hija dónde nos metemos. Aquí no hay casa de alquiler», lamenta.
Al otro lado de la calle, otra de las vecinas empezará el Año Nuevo metiendo todas sus pertenencias en cajas. Después de ocho años viviendo en Fresno el Viejo, regresa junto a sus progenitores a Valladolid. «Mis padres no me pueden ayudar porque están jubilados y yo tengo el mismo problema que otros vecinos, soy autónoma», explica. En su caso han decidido no continuar en la vivienda. «Es un pueblo que se queda sin gente y sin servicios. Cómo te pones a comprar una casa aquí», expresa. «Nosotros queríamos haber hecho una reunión conjunta, pero nos la han denegado. El alcalde nos dijo que fuéramos a hablar con Somacyl de uno en uno», señala.
Pero no todos los vecinos se encuentran en esta tesitura. A una de las familias aún le quedan varios años de contrato, con lo cual no se verá en la obligación de decidir entre adquirir el inmueble o abandonarlo. «Nosotros, supuestamente, estamos exentos de la obligación de compra o irte a la calle», detallan, al tiempo que subrayan que el 95% de los vecinos de esta calle no tienen para dar el 20% de entrada de una hipoteca. Son casas de protección social, eso significa que hay personas que realmente necesita este tipo de alquileres a un precio reducido».
Antes de llegar al mismo apuro que sus vecinos, esta familia está pensando en mudarse de localidad. «Nos iremos más cerca del trabajo o a Medina del Campo. Desde luego que aquí no nos vamos a quedar, porque ya que nos tenemos que cambiar de casa y nos están obligando a hacer una inversión, no vamos a hacerla en este pueblo. Nos iremos a otro que tenga más servicios».
«Lo único que quieren hacer con estas casas es venderlas. He tenido un problema con la caldera, se deberían hacer cargo ellos, y me han dicho que ni tienen intenciones de volver a arreglar absolutamente nada. Que todo lo que se rompa lo arreglemos nosotros», relata. «Van a echar a las personas que no pueden comprar estas casas para venderlas a personas que vienen de veraneo. Y la ley dictamina, y en el contrato también lo pone, que son primeras viviendas y hay que estar viviendo en ellas los 365 días del año».
«No podemos decirles que incumplan con el contrato porque eso es prevaricación»
El problema de estos vecinos ha llegado a llegado al pleno ordinario del mes de diciembre en Fresno el Viejo. El PSOE presentó una moción para que se busquen soluciones e instar al regidor a que actúe como intermediario entre los afectados y Somacy, así como para dejar de prestar cualquier colaboración con la entidad «en caso de que se desahucie a estos vecinos», señalan desde la oposición.
«El Partido Socialista miente en eso. No existe desahucio, lo que existen son muchas mentiras del PSOE», asegura el alcalde, Luis Miguel Muñumer. «Somacyl está cumpliendo con un contrato firmado hace un número de años. No les están desahuciando ni les están haciendo nada; están cumpliendo con el contrato. Nosotros, como Ayuntamiento, no podemos decirles que lo incumplan porque eso es prevaricación», reitera el alcalde.
El regidor asegura estar «ayudando a mis vecinos» y haber actuado como intermediario con el consejero delegado de Somacyl, José Manuel Jiménez, quien le comento que, en caso de haber algún problema a la hora de conseguir la hipoteca, ayudaría a los afectados. «Hemos atendido por teléfono, y personalmente en algún caso, a todas las personas que se han dirigido a nosotros, porque los mayores interesados en que esas viviendas se adquieran somos nosotros mismos», señala Jiménez.
El consejero delegado de Somacyl asegura estar en contacto con los inquilinos con el fin de «buscar la mejor solución para ellos». De hecho, tal y como avanza, ocho de los nueve propietarios a los cuales les vence el contrato van a proceder a comprarlas. «Les bonificamos en la compra el 100% de la renta que ya han pagado. El coste de adquisición de estas casas está en torno a los 73.000 euros», comenta.
En caso de que alguno de los propietarios actuales no estén interesados en comprar la vivienda, Somacyl procederá automáticamente a su venta. «Hay unos asuntos fiscales que vienen desde el momento en que se construyen las viviendas y se plantean de alquiler con opción a compra. Al final es una vivienda en venta y hay que venderla», detalla. Fresno el Viejo no es el único municipio de la provincia de Valladolid con unas viviendas de este estilo. Traspinedo cuenta con ocho casas de alquiler con derecho a compra y Pozaldez, con otras doce.
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