La cencerrada pone fin a las fiestas de Urones de Castroponce

La tradicional cencerrada puso este domingo fin a las fiestas patronales de San Antón de Urones de Castroponce. Como es tradición, al acabar el baile, a altas horas de la madrugada los jóvenes fueron de casa en casa haciendo sonar los cencerros hasta que les eran ofrecidos dulces y licores.

El alcalde de la localidad, Basilio Ignacio Castañeda, volvió a recordar que «es una tradición en la que el objetivo es que la fiesta continúe, que no se acabe, de estar todo juntos». El premio de la rifa realizada por la cofradía el día de San Antón ha recaído en el popular vecino Aureliano Rodríguez, conocido como Nanín, que recibirá un jamón, dos botellas de cava y un lechazo. Hace años la costumbre era que se rifara un cerdo, que durante todo el año había estado suelto por las calles del pueblo.