Los Bomberos abastecen de agua a una granja porcina de Peñafiel

La razón de este acarreo hídrico -de carácter extraordinario- para consumo animal se debe a que la citada crecida del río inundó el parque y zona de ocio del Valdobar, lugar donde se encuentra el motor que toma el agua del Duratón y lo impulsa a la granja. La caseta que lo alberga se inundó y la bomba se averió, cesando así su función de trasvase de agua hacia la explotación ganadera.

El abastecimiento que realizan los Bomberos peñafielenses a la granja de cerdos no es diario -no es necesario, las reservas del deposito duran varias jornadas-, se realiza cada cuatro o cinco días, es puntual y transitorio, y tiene un carácter de emergencia, siguiendo el procedimiento habitual y estipulado. El objetivo es evitar que falte el agua a los animales y estos sufran las consecuencias de la deshidratación, la cual, como en el ser humano, llega rápido y es letal. En el caso de los cochinos la falta da agua produce una intoxicación por sal, y, una pérdida superior al 15% de su consumo, puede conllevar su muerte en 48 horas, o poco más. Además de letargo, entre los primeros síntomas de escasez de agua en el organismo de estos animales destaca un menor consumo de comida.

Este servicio que prestan los Bomberos es provisional, temporal, facturándose la correspondiente tasa por el servicio dado. De retrasarse el arreglo del motor -o cualquier otra contingencia que devuelva a la normalidad el abastecimiento de las instalaciones porcinas- el propietario de esta ganadería -o de cualquier otra que sufra una situación similar con el abastecimiento de agua para sus animales- debe contratar un servicio privado de abastecimiento hasta el restablecimiento normal del servicio del que hasta entonces disponía.