Valladolid

Becilla de Valderaduey vence al calor y se vuelca con su mercado artesanal

La plaza del Caño acogió este pequeño mercado con puestos de productos tradicionales de la zona, tales como embutidos de la matanza, pastas, panes, mieles, polen, legumbres, tortas de chicharrón, galletas tradicionales castellanas de nata o quesos castellanos, además de maderas talladas, cazuelas de barro de Pereruela, flores secas, cestos, navajas o imanes con una imagen del pueblo, entre otros productos, además de una exposición de objetos antiguos.

Asimismo, se celebraron talleres que contaron con gran participación de los más pequeños. Destacaron el de alfarería, el de realización de cachas y cestas y el de construcción de cajas nidos. Una de las actividades que más éxito tuvo fue la cata de queso curado de leche cruda de oveja, que congregó a más de medio centenar de personas. La presencia de un bar en el mercado ayudó a combatir con bebidas frescas las altas temperaturas, sin que faltasen tapas como el pincho de calabacín.

A pesar del calor, el mercado fue un éxito de participación, siendo su principal objetivo el de «dinamizar la vida del pueblo, tanto de los vecinos como de los que regresan en vacaciones, para que encuentren motivos para volver», según explicó la alcaldesa, María Jesús Peña, quien también hizo ver «la importancia de ser un pueblo que tenga vida con actividades atractivas que atraigan y que haya quien se anime a comprar una casa y vivir en la localidad». «El pueblo tiene que estar unido», continuó.

El mercado se celebró por la gran presencia de vecinos y visitantes en el pueblo, al ser el fin de semana previo al inicio de las fiestas patronales en honor a San Roque. Un mercado que a lo largo de toda la mañana de este domingo tendrá su continuación con la celebración, también en la plaza del Caño, de la séptima edición de Calabecilla, una feria en la que el gran protagonista será el calabacín. Así, habrá puestos que venderán esta delicia culinaria tan abundante en los huertos del municipio. Además, se llevará a cabo una visita a un huerto, donde se enseñará cómo se plantan los calabacines y se realizará un taller gastronómico para conocer una receta con este fruto de la huerta como el protagonista.

La regidora recordó que esta Calabecilla nació hace unos años «ante la grandísima cantidad de calabacines de las huertas locales, que no se sabía qué hacer con ellos, por lo que surgió esta idea para que se pudieran vender». Durante esta semana, dentro del programa de fiestas, el miércoles se celebrará la vigésima edición del Día de Roma, que ya es una cita ineludible del verano de Becilla con un regreso a su pasado romano.