El alcalde de Ceinos, a juicio por desobedecer tres sentencias sobre la custodia de su hijo

Hasta tres sentencias judiciales ha incumplido el alcalde de Ceinos, Ricardo Collantes, hasta que la Fiscalía ha decidido acusarle por desobediencia reiterada y sentarle en el banquillo de los acusados. Esta vez por negarse a cumplir el fallo judicial de entregar a su exesposa al hijo de ambos, que en la actualidad tiene 10 años. El Juzgado de lo Penal 4 verá el procedimiento contra Collantes, que desde hace año y medio perdió la custodia del menor, pero «se niega» a que el niño vea a su madre. Esta relata que ha tenido que marcharse de la localidad «por el acoso continuado al que me tenía sometida» y que su expareja se ha negado a entregar al niño «aunque tengo la custodia tras un nuevo juicio el pasado diciembre». Señala la exmujer que Collantes paga la multa de 300 euros por incumplir las sentencias y sigue sin entregarle a su hijo ni le paga pensión alguna. Ahora, en la vía penal, el fiscal pide que se le imponga una pena de seis meses de prisión e inhabilitación al sufragio pasivo.

El menor, que cumplió 10 años en diciembre, sigue con su padre sin que este haya dado un paso para cumplir los requerimientos judiciales sobre la guarda y custodia.

En esta guerra por la custodia del menor, señala la exmujer, el próximo mayo solicitará que se le retire al alcalde la patria potestad por los reiterados incumplimientos de sentencia. «Me ha llegado a amenazar con que me atuviera a las consecuencias si esta situación le traía consecuencias políticas», subraya la denunciante, que perdió la vista parcial hace cuatro años. «Ha puesto en mi contra a mi hijo, le dice que soy mala madre», se lamenta. Lleva sin ver al menor desde el 19 de septiembre de 2020.

En mayo de 2020, la madre de ella denunció al regidor por malos tratos psicológicos a su hija durante una discusión. En el contexto de los trámites de separación de la pareja, que todavía convivía bajo el mismo techo. Tras pasar una noche en la Comandancia de Villalón de Campos, la jueza puso a Collantes en libertad sin fianza ni medidas cautelares y denegó la orden de protección solicitada por la mujer al considerar que no existían datos que evidenciaran una situación de riesgo. Hasta ese momento no constaban antecedentes por violencia de género.