Nicolás Román entregando algunos de los juguetes y material escolar en uno de los colegios de Algemesí. E. N.

Más de 800 juguetes y peluches vallisoletanos llenan de ilusión las calles de Algemesí

Nicolás Román, un joven de Matapozuelos, organizó con éxito el proyecto 'Un juguete para Valencia' y el pasado 18 de diciembre llevó la alegría a los niños afectados por la DANA en Valencia

Yaiza Cobos

Valladolid

Viernes, 20 de diciembre 2024, 15:56

Hace unas semanas, El Norte de Castilla se hacía eco de la acción solidaria de Nicolás Román. El joven vecino de Matapozuelos, estudiante de Educación Primaria de Valladolid, ponía en marcha el proyecto 'Un juguete para Valencia' con el objetivo de recolectar el máximo ... número de artículos infantiles y entregarlos personalmente en mano en algunas de las zonas afectadas por la DANA. Así, entre el 27 de noviembre y el 8 de diciembre, varios negocios dispersos por la provincia - Valladolid, Medina del Campo, Matapozuelos, Arroyo de la Encomienda - así como en la ciudad de Palencia, se ofrecieron voluntarios para convertirse en puntos de recogida.

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«Hemos conseguido agrupar 800 juguetes, 150 peluches, bastante material escolar y muchos juegos educativos y didácticos para colegios», indica Román. Aunque algunos de los artículos se encontraban en mal estado, la gran mayoría ha podido llevarse a Valencia. Una entrega que ha tenido lugar el pasado 18 de diciembre en la Plaza del Mercado de Algemesí. «Ha sido un momento muy emotivo», señala el joven. En torno a las 17.30 horas, junto a otras dos personas que le acompañaron, comenzaron a montar el puesto. «Llevamos luces, un árbol de Navidad decorado y un altavoz», puntúa.

Su presencia alertó rápidamente a todos los niños de la localidad «y se pusieron a hacer cola», detalla. «Nos cambiamos, nos vestimos de elfos y estuvimos repartiendo todo entre los pequeños», expresa. Como si de unos ayudantes de Papá Noel se trataran, los tres vallisoletanos repartieron sonrisas de felicidad entre los vecinos. «El ayuntamiento se ha portado muy bien con nosotros. Nos puso a Protección Civil, a la Guardia Militar y a tres Scouts de Maristas», asegura.

No solo repartieron los juguetes en la calle, sino que también algunos de ellos se han entregado a los alumnos del CEIP Carme Miquel, los cuales han sido realojados en el CEIP Ribalta; Maristas y CEIP Verge del Pilar; sobre todo material escolar. Por otro lado, muchos de los libros que la gente donó, «algunos de ellos eran colecciones y otros no eran infantiles», se han cedido a la Biblioteca Municipal de Algemesí.

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«Volvemos muy contentos y muy satisfechos. Aunque ha sido muy duro el proceso, porque no teníamos infraestructuras suficientes para hacerlo, agradezco mucho a mi familia porque se ha volcado totalmente», manifiesta Román. Y es que, tal y como señala, cuando «nos metimos en esto, había que sacarlo adelante» y ha merecido la pena.

Entrega de juguetes en algunos colegios de Algemesí Nicolás Román

Han pasado casi dos meses desde que la DANA azotó Valencia. Y aunque vecinos y voluntarios no han dejado de colaborar en las labores de limpieza, la normalidad parece que aún no ha llegado. «Cuesta ver la flechas pintadas en el sueño, todavía ves algún coche que no funciona en la calle y muchos negocios que todavía no han podido abrir o siguen limpiando. Me ha llamado la atención que aún siguen limpiando garajes», detalla.

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Además, muchos de los afectados les han trasladado que aún no han recibido ninguna ayuda económica. «Me da qué pensar. A ver si todos llevamos mes y medio involucrándonos en esto y quienes tienen que involucrarse no lo están haciendo. No están pidiendo que vayan a ayudar, están pidiendo el dinero que les hemos dado todos», manifiesta Román. Una cuantía que necesitan para volver a poner en pie negocios enteros y regresar, poco a poco, a su vida. «Nos decían que necesitan mobiliario y electrodomésticos. Todo ha sido arrasado. Los muebles por mucho que los limpies están oxidados y los de maderas están todos abiertos», añade.

Tras haber visitado Algemesí en dos ocasiones, una de ellas limpiando y la otra entregando los juguetes, Nicolás Román ha dejado un pedazo de su corazón allí. «Sí que tenemos pensando volver en unos meses. En la medida de lo posible, nos gustaría seguir ayudando», cerciora. Por el momento esperarán a conocer «qué es lo siguiente que necesitan» para promover otra iniciativa solidaria.

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