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La espera de varios meses que sufren quienes quieren comprar un coche nuevo debida a la escasez de oferta de algunas marcas deriva a muchos conductores al mercado de segunda mano. El aumento de la demanda de usados hace que tampoco sea fácil ... encontrar el modelo deseado con la edad apetecida. Ahora, también los vendedores de vehículos de ocasión importados sufren problemas, aunque no por falta de componentes electrónicos ni por falta de disponibilidad de coches. La Asociación de Vendedores de Vehículos de Ocasión de Valladolid (AVO) alerta de que las matriculaciones de los automóviles de importación sufren retrasos de tres semanas, cuando lo habitual era que tardasen entre dos y tres días hábiles. En este caso, al otro lado del problema se encuentra la Dirección General de Tráfico.
José Luis Bodas, presidente de AVO, explica que esta situación está provocando grandes pérdidas en el sector, al impedirles materializar numerosas ventas en la temporada más alta del año. «Junio y julio son los mejores meses, los que nos permiten hacer media con el resto y llegar al final del ejercicio en unos números que, digamos, son regulares». La veintena de asociados de AVO se han visto «obligados en los últimos tiempos a traer cada vez más coches de fuera por la escasez» y sufren «cuantiosas pérdidas».
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«En este negocio es habitual que los compradores quieran el coche para irse de vacaciones o hacer algún viaje programado. Cuando descubren la espera que estamos teniendo para completar el trámite de la matriculación, mucha gente renuncia a la compra», señala Bodas.
La asociación se ha dirigido a la Dirección Provincial de Tráfico para que acabe cuanto antes con un problema que comenzó a producirse en mayo, se ha agravado en junio y «amenaza la continuidad de muchos negocios». «Tras remitir una carta a la jefe provincial de Tráfico, Inmaculada Matías Fernández, el pasado 2 de junio, la respuesta ha sido que existe un retraso de unos cinco días hábiles y nos pedía disculpas por estos hechos». Bodas tiene acreditado que los retrasos en el trámite administrativo llegan a las tres semanas y teme que vaya a más, ya que «la situación empeora y estamos en un momento en el que cada vez hay más demanda de matriculaciones, más vehículos y más gente de vacaciones».
Los vendedores de usados de importación traen los vehículos sobre todo de Francia, Bélgica y Alemania y suelen ser modelos de gama media-alta -Audi, VW, BMW o Volvo- ya que deben asumir costes elevados en el traslado. «Ya bastante nos cuesta vender como para que, ahora, nos pongan también tantas trabas administrativas. Exigimos que esta situación acabe cuanto antes», reclama el presidente de AVO.
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