Los Presupuestos vuelven a retrasar la inversión en la Ciudad de la Justicia de Valladolid

En 2022 se anotaron 100.000 euros de presupuesto. Para 2023 aparecen, en el borrador de las cuentas estatales, 200.000 euros más. Y en 2024, en lugar del grueso que se apuntaba hace doce meses, se consignan 300.000 euros. Ya en 2025 aparecen en las cuentas 880.000 euros, y en 2026 se cifra la inversión en 5,3 millones de euros.

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Las cuentas del Estado para Valladolid, en cuanto a inversiones, vuelven a incluir en el apartado de «denominación» a viejas conocidas: la pasarela de Boecillo sobre la N-601, la autovía A-60 entre Valladolid y León y la mejora de la capacidad de la A-62 entre Tordesillas y Cigales. Lo que ocurre es que en la columna de la tabla de Excel donde figuran los datos por anualidades apenas hay dinero 'práctico'. Medio millón de euros para el tramo Rioseco-Mayorga, otro medio millón para el de Mayorga a Santas Martas, medio millón para el de Villanubla a La Mudarra y tanto igual para el de La Mudarra a Rioseco. Y más de lo mismo para los dos tramos en que subdivide la ampliación de la A-62, de Simancas a Tordesillas y de Simancas a Cigales.

La A-11 sí que recibe fondos para seguir con la aceleración de los últimos años, en los que se han inaugurado varios tramos. Así, en 2023 se destinan 25,5 millones al tramo de 19 kilómetros entre Olivares y Tudela de Duero, que se completan con 15 millones en el año 2024 y 21 más en el año 2025. El tramo entre Quintanilla y Olivares de Duero, otros 8 kilómetros de trazado, recibirá 54 millones de euros en 2023, con un impulso de 11,4 al año siguiente y de 17,4 en 2025, año en el que se prevé el fin de las obras. La autovía del Duero, eso sí, seguirá casi parada en el lado oeste, entre Zamora y Portugal, con apenas unas cantidades simbólicas para mantener la obra en los presupuestos. En la vertiente soriana siguen las inversiones entre Burgo de Osma y San Esteban de Gormaz (14 millones en 2023).