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Agentes del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Valladolid denunciaron a lo largo del pasado mes de julio a un total de 115 conductores por conducir tras haber consumido alcohol y drogas. Entre los denunciados, 53 por dieron positivo en drogas y 62 en alcohol, informa Europa Press.
Durante ese mes se efectuaron 163 pruebas de detección de drogas a conductores que presentaban algún síntoma de haber ingerido alguna sustancia, habían cometido alguna infracción o se habían visto implicados en un accidente, según informan fuentes del Instituto Armado.
Del total de esas pruebas, 53 resultaron positivas, es decir un 32,51%. Como viene siendo habitual, entre las drogas más consumidas están la cocaína, el cannabis y las anfetaminas.
Por lo que respecta al alcohol, durante el mes de julio se realizaron 7.936 pruebas de control de alcoholemia y 62 conductores dieron positivo. De ellos, 55 fueron detectados en controles preventivos, dos tras haber cometido una infracción y otros cinco por estar implicados en un accidente.
Por otra parte, de los 62 conductores que dieron positivo, a 51 se les ha abierto expediente sancionador por vía administrativa, mientras que a los once restantes se les han instruido diligencias para su posterior traslado a la autoridad judicial por superar la tasa de 0,60 mg/l en aire espirado. Asimismo,durante ese mes se investigó a once conductores de turismo; tres por pérdida de vigencia del permiso, siete por carecer de él y uno por privación del permiso por decisión judicial.
La ingesta de bebidas alcohólicas influye en el conductor de un vehículo de forma directa. Entre sus consecuencias, destaca la disminución de la capacidad sensorial, de reflejos y de atención en la conducción, desvirtuando la percepción de la realidad, determinando una conducción inapropiada y creando un concreto peligro para la vida propia y del resto de los usuarios de la vía, lo que aumenta exponencialmente la posibilidad de sufrir un siniestro vial.
Estas conductas al volante podrían conllevar administrativamente hasta 1.000 euros de sanción y penalmente podrían ser castigadas con la pena de prisión de tres a seis meses, con la de multa de seis a doce meses o con la de trabajos en beneficio de la comunidad de treinta y uno a noventa días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
Bajo los lemas 'No drogas al volante' y 'No alcohol al volante, la Policía Local de Valladolid llevó a cabo durante los días 3, 4 y 5 de agosto, los «habituales controles» de alcoholemia y drogas. Aunque la mayoría de conductores dio negativo en ambos controles (el 94,71 por cierto), un centenar fue sorprendido por los agentes.
Tal y como asegura la Policía Municipal a través de su cuenta de Twitter, se detectaron nueve alcoholemias positivas y dos conductores dieron positivos por drogas, lo que representa el 5,29% del total. «Este fin de semana, se han realizado los habituales controles de alcohol y drogas: de 170 pruebas realizadas se detectaron siete alcoholemias positivas y dos conductores dieron positivos por drogas. #NoalcoholAlVolante #NodrogasAlVolante», rezaba el tuit.
Este fin de semana, se han realizado los habituales controles de alcohol y drogas:
— PoliciaValladolid (@PoliciaVLL) 6 de agosto de 2018
de 170 pruebas realizadas se detectaron siete alcoholemias positivas y dos conductores dieron positivos por drogas.#NoalcoholAlVolante#NodrogasAlVolante pic.twitter.com/Gu1GupQiJT
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