Las piscinas abren en Valladolid con el agua de Las Moreras aún no apta

Con esa premisa, las puertas de las piscinas de Canterac, Juan de Austria, Puente Duero y Rondilla ya están abiertas desde este viernes a la espera de superar las cifras del verano pasado, el segundo más cálido de los que se recuerdan en la provincia. Por el momento, en este primer día, los bañistas se cuentan por unidades, una cifra que crecerá exponencialmente con la llegada de julio y agosto. El 1 de septiembre, justo antes de las fiestas de la Virgen de San Lorenzo, se dará por concluida la temporada de 2024.

Para estos 79 días de temporada el horario para refrescarse siempre será el mismo: desde las 12:30 horas hasta las 20:30 horas y cuya entrada simple será de 4,50 euros para adultos y de 2,60 para niños (de 4 a 17 años), que se puede rebajar ligeramente si se opta por la modalidad de tarjeta individuales de bono. Para empadronados, el precio es de 25 euros al mes para adultos, 16,50 euros para menores, pensionistas y jubilados. Existe un bono familiar, que incluye un cónyuge o ambos, e hijos del mismo, o de los mismos, menores de 18 años, a un precio de 24,50 euros para el titular, al que se suman 9 euros por cada miembro de la unidad familiar -a partir del quinto miembro es gratuito-.

Para no empadronados el abono individual de adulto cuesta 58 euros al mes; el infantil, jubilados y pensionistas, 39,50 euros; y en los abonos familiares serían 56 euros al mes para el titular y 21 euros al mes por cada miembro adicional.

La temporada de piscinas llega a Valladolid con el agua de la zona de baño de Las Moreras no apta aún para el baño. Sigue sin considerarse salubre adentrarse a las aguas del Pisuerga. La prohibición es temporal y podría modificarse solamente tras un histórico de análisis limpios de contaminación. Cada doce o quince días, la Dirección General de Salud Pública de la Junta realizará un nuevo muestreo y la suma de varios análisis con buenos resultados podría cambiar su calificación.

De momento, este viernes la estampa en la arena era de los últimos días: con personas tomando el sol desde primera hora y algún joven practicando deporte. Junto a ellos dos carteles insertados en el suelo con la prohibición expresa para el baño por parte de la Consejería de Sanidad.