«Vamos a plantarnos quinientas personas en el pinar sí o sí»

«Ir a Valladolid en enero es ya una cuestión de honor y por eso ese fin de semana nos vamos a plantar quinientas personas en el pinar de Puente Duero sí o sí», anticipa Joaquín Ogallar, un veterano motero sevillano que está impulsando, entre otros, la convocatoria alternativa pingüinos prohibidos a través de las redes sociales. El aficionado defiende que «aquí los pingüinos somos nosotros, por encima de ningún club, y por eso vamos a estar allí el segundo fin de semana de enero porque nadie puede impedirnos el derecho de reunión, ¿no?».

Ogallar, cuyo perfil de Facebook advierte de que su formación ha tenido lugar en la carretera, relata cómo lleva más de treinta años viajando a la concentración motera a lomos de su veterana Guzzi de 500 centímetros cúbicos (suma 377.000 kilómetros) y aclara que «mi familia es la moto y los moteros y por eso creo que no podemos permitirnos perder esta concentración». Y tanto es así que asegura que él y sus hermanos moteros han quedado ya ese fin de semana en Valladolid. «La idea es pasar esos tres días allí, con organización o sin ella y luego acudir después a Tordesillas a Motauros esta concentración se celebra el fin de semana siguiente», añade. Joaquín Ogallar afirma que ya ha contactado con moteros, incluso, de Noruega y reitera que la segunda semana de enero «seremos cientos los que acudimos a reunirnos en Pingüinos». 580 kilómetros le separan a él de Valladolid desde su Sevilla natal. «Llueva o truene, allí nos vemos».

Ogallar, cuyo perfil de Facebook advierte de que su formación ha tenido lugar en la carretera, relata cómo lleva más de treinta años viajando a la concentración motera a lomos de su veterana Guzzi de 500 centímetros cúbicos (suma 377.000 kilómetros) y aclara que «mi familia es la moto y los moteros y por eso creo que no podemos permitirnos perder esta concentración». Y tanto es así que asegura que él y sus hermanos moteros han quedado ya ese fin de semana en Valladolid. «La idea es pasar esos tres días allí, con organización o sin ella y luego acudir después a Tordesillas a Motauros esta concentración se celebra el fin de semana siguiente», añade. Joaquín Ogallar afirma que ya ha contactado con moteros, incluso, de Noruega y reitera que la segunda semana de enero «seremos cientos los que acudimos a reunirnos en Pingüinos». 580 kilómetros le separan a él de Valladolid desde su Sevilla natal. «Llueva o truene, allí nos vemos».