Una web permitirá comprar en los cinco mercados de Valladolid y recibir el pedido en casa

Una merluza de pincho de tal pescadería que hoy está a buen precio, esas manzanas golden que pone en su escaparate tal frutería, un kilo de filetes de ternera... Producto fresco, despachado por profesionales y sin moverse de casa. Un recorrido virtual entre mostradores y vitrinas llenas de género a través de una herramienta que nos llevará al mercado elegido y nos ofrecerá, fotografías incluidas, información actualizada cada día de productos, precios y posibles ofertas.

El proyecto pretende unificar la imagen de estas instalaciones y que la experiencia del comprador sea conjunta. La Concejalía de Innovación, Comercio y Empleo, que gestiona Charo Chávez, destinará un presupuesto de 100.000 euros para poner en marcha este sistema con el que se busca la «transformación digital» de unos enclaves que en algunos casos están «desactualizados y necesitan un impulso», según explica la edil responsable del área. Aunque la inversión ya estaría asegurada con una partida municipal, se concurrirá a ayudas europeas para intentar captar fondos.

La competencia de las grandes superficies obliga, según explica Chávez, a que los industriales modernicen sus canales de venta. La experiencia presencial de la compra es importante, pero también se busca atraer a «nuevos clientes», principalmente los más jóvenes, con menos tiempo para llenar la cesta y acostumbrados a adquirir muchos productos a través de su teléfono o desde su ordenador personal. Sentado en casa, el comprador podrá organizar su cesta entre una amplia variedad de referencias, de una o de otra plaza indistintamente.

Que estos mercados tradicionales entren en el mundo virtual puede ayudar también a que los puestos vacantes en los diferentes espacios ganen atractivo para nuevos emprendedores o para asegurar el relevo de los que ya están en activo, especialmente en aquellos donde la ocupación es más baja.

La puesta en marcha de esta plataforma conllevará también un reparto de los pedidos unificado. El planteamiento es que se haga de forma sostenible mediante vehículos eléctricos, aunque este uno de los aspectos que está por determinar. El proyecto se sacará a licitación y será la empresa seleccionada la que se encargue de la gestión de la aplicación en colaboración con los industriales.

Charo Chávez subraya que el plan busca también evitar el vaciamiento del centro y de los barrios en los que se sitúan los mercados, «que sean dinamizadores y tractores» de actividad en sus diferentes ubicaciones.

La digitalización incluye también la instalación de wifi en las cinco plazas y de tecnología 'bigdata', que permitirá la obtención de datos sobre el número de clientes, sus intereses a la hora de llenar su cesta o el nivel de fidelidad de los compradores, entre otra información, que ayudará luego diseñar estrategias de comercialización.

Desde la Federación de Comercio de Valladolid (Fecosva), con representación en los mercados municipales, su gerente, Milagros Aguado, considera positiva esta iniciativa, de la que habrá que concretar costes y someterla al parecer de los industriales, según matiza. «Durante el confinamiento y el estado de alarma los industriales de los mercados han sido un ejemplo de atención a los clientes; el Val con su plataforma, pero otros a través del WhatsApp han seguido atendiendo y llevándoles la compra a sus casas», destaca Aguado, quien considera básica la venta 'on-line' y el reparto a domicilio, más si cabe en estos tiempos inciertos. Alejandro García Pellitero, presidente de Avadeco, coincide en que «todo lo que ayude a las ventas es bienvenido».

Esta es una de las primeras medidas del plan estratégico en el que trabaja el departamento de Charo Chávez para los mercados, que quiere potenciar también la venta de alimentos ecológicos y de proximidad en los puestos vacantes de las cinco plazas propiedad del Ayuntamiento.