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Abril, un mes tradicionalmente favorable para el empleo, ha hecho honor a su buena fama a pesar de que este año la Semana Santa ha caído en marzo. Es lo que demuestran los datos del paro registrado que ha difundido el Ministerio de Trabajo y ... Economía Social este lunes, que recogen un descenso del desempleo del 3,11% en Valladolid respecto al mes anterior que sitúa el número de personas sin trabajo en 23.141, de nuevo por debajo de la barrera psicológica de los 24.000. De hecho, para encontrar una cifra más baja hay que remontarse a agosto de 2007.
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La bajada del paro registrado en abril en la provincia, que en términos absolutos asciende a 742 ciudadanos, es ligeramente superior a la que se contabiliza en Castilla y León (3,01%), y está un punto por encima de la media nacional del 2,22%. Si la comparativa se hace respecto a abril de 2023 las estadísticas son aún más favorables para Valladolid, puesto que implican una disminución del 7,82% que se traduce en casi 2.000 desempleados menos, porcentaje que contrasta con el 5,32% de la región y casi duplica el 4,37% de España.
Y eso que el balance también es positivo para el conjunto del país, puesto que el desempleo baja en 60.503 personas en abril y se sitúa en 2.666.500, la cuantía más reducida desde septiembre de 2008. De hecho, Canarias es la única autonomía en la que se incrementa. El cómputo del Movimiento Laboral Registrado (MLR) que elabora la Vicepresidencia Segunda deja otro récord: por primera vez se han sobrepasado los diez millones de mujeres trabajando, durante los días 15 al 29, como consecuencia de que la mayor parte del empleo de nueva creación es para ellas.
El análisis por sectores económicos revela que todos han mejorado respecto a marzo. Y donde más han caído los parados en Valladolid ha sido en los servicios. Seis de cada diez personas que han abandonado las listas del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) pertenecen a esa área de actividad, en concreto 468. A continuación figuran, por este orden, el colectivo sin ocupación anterior (94 parados menos), la industria (-78), la construcción (-57) y la agricultura (-45). Se trata de resultados coherentes con la distribución del desempleo, puesto que de los vallisoletanos que quieren trabajar y no pueden hacerlo la mayor parte, 16.201 (el 70%), se adscriben al sector servicios.
Por otra parte, de los 52.185 contratos que se firmaron en abril en Castilla y León –34.085 de ellos temporales y 18.100 indefinidos– el grueso, 11.427, se suscribieron con destino a un centro laboral vallisoletano, cantidad que además encierra una notable subida del 12,54% en relación a marzo. Se trata de una cantidad muy elevada y a gran distancia de las dos siguientes provincias de la región en importancia, Burgos y León, donde ascendieron a 7.874 y 7.612, respectivamente. Zamora fue la única donde esta variable se pintó de rojo, al anotar una caída del 1%.
En cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, España ha superado los 21 millones y ha creado empleo durante 48 meses seguidos, según ha destacado el departamento que dirige Elma Saiz. En Castilla y León se sobrepasan los 965.000 afiliados, la cuantía más alta desde septiembre del año pasado. Valladolid figura a la cabeza de la comunidad en términos absolutos, puesto que los inscritos crecen en 1.377 respecto a marzo (el 0,61%). Su incorporación sitúa en 227.976 los afiliados a la Seguridad Social en abril en la provincia, de los que la inmensa mayoría pertenecen al Régimen General, en concreto el 84,8% del total (193.335 personas) y solo el 15,2% son autónomos (34.641).
Resulta interesante, asimismo, hacer una comparativa con lo que ocurría en abril del año pasado. Por entonces había 5.693 vallisoletanos menos en alta en la Seguridad Social, o lo que es lo mismo, la afiliación 'ha engordado' el 2,56% en el último ejercicio en la provincia, frente al 1,97% de media autonómica y el 2,36% nacional.
De los 23.141 parados registrados el mes pasado en Valladolid 2.212 eran extranjeros, según la estadística del Ministerio de Trabajo y Economía Social. De ellos la mitad, 1.130, estaban incluidos en el sector servicios, seguido muy de lejos por el colectivo sin empleo anterior (539), la agricultura (261), la construcción (153) y la industria (129). Su situación ha mejorado mucho, a juzgar por la subida del número de contratos firmados por trabajadores de otros países: ascendieron a 2.323 en abril, el 34,6% más que el mismo mes de 2023 y el 11,1% más que en marzo de este ejercicio.
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