Valladolid

El ocio nocturno se suma a la moda de zonas VIP: 250 euros la noche

Ahora bien. Valladolid es una ciudad que «aún no puede explotar este servicio», pues la capital del Pisuerga no cuenta por el momento con muchas discotecas que dispongan del «espacio suficiente» como para tener una zona exclusiva para un determinado público. No obstante, son ya varias las que han optado por sumarse recientemente a la moda de un formato que, «después de la pandemia, cada vez más gente lo reclama».

Eduardo Machín, gerente del Moss Club, la discoteca más grande de Valladolid y que, durante muchos años, funcionó bajo el nombre de Kerala en la avenida Ramón Pradera, asegura que «desde hace ya tiempo se ha implantado este concepto en esta discoteca« aunque recalca que «tras dos años sin poder salir de fiesta, mucha más gente se anima a solicitar este tipo de fiestas». Caracterizada por organizar conciertos multitudinarios con diferentes dj, también disponen de hasta tres espacios vip diferentes, «el más básico a un precio de 250 euros», con el que se incluye una lujosa botella con cubitera y amplios sofás que incitan a sentarse y no volver a levantarse en toda la noche. El objetivo es siempre el mismo, «conseguir que los clientes dispongan de un espacio muy cuidado, mimado y más privado» explica Machín.

Se apagan las luces, la música se detiene y de repente, se escucha a todo volumen una épica canción mientras se abre entre la multitud un pasillo de camareros con carteles luminosos, una cubitera y varias botellas con bengalas que iluminan toda la sala. Así es como acostumbran a presentar este tipo de espacios reservados a los clientes, una manera original de servir alcohol de primeras marcas que pueden ser «desde botellas muy básicas hasta algunas exclusivas de champagne» asegura Eduardo Machín.

En cuanto a la media de edad de los clientes que hacen uso de las zonas vip, el gerente de esta discoteca afirma que «acude todo tipo de público, desde jóvenes de 20 años a personas que superan los 40» ya que, a pesar de que hace años estos servicios se ofrecían a «un público muy específico», hoy en día cada vez más gente «está dispuesta a pagar un poco más para contar con mejores comodidades». También considera que, desde que finalizó la pandemia, «las ganas de volver a salir de fiesta» han hecho que muchas discotecas experimenten un mayor reclamo en este tipo de servicios los fines de semana.

Wilkin Pimentel, gerente de la discoteca Fantasy Disco Pub que se encuentra en la calle Espíritu Santo, también ha empezado a ofrecer espacios VIP en su establecimiento y asegura que «estamos en las fechas donde más se reclama este servicio» pues en las cenas de empresa, que se celebran antes de las vacaciones de Navidad, se busca culminar una agradable velada con compañeros de trabajo en un lujoso reservado. A pesar de que este local acostumbra a celebrar fiestas latinas donde priman los bailes y el espectáculo, también disponen de zonas VIP exclusivas. En el caso de este local, «el público acostumbra a ser de entre 30 y 35 años» pues «son ya personas que pueden permitirse costearse esta clase de fiestas». Los precios, algo más baratos que en otras discotecas de la ciudad, oscilan entre 70 y 120 euros, aunque «todo depende en gran parte del tipo de botellas que escojan los clientes» explica Pimentel.

Para ofrecer mayor comodidad, estos reservados también ofertan camareros exclusivos, encargados de atender a ese número limitado de clientes durante toda la noche. Además, también disponen de una pista despejada del resto de usuarios de la discoteca.