Cordón policial en los accesos al entorno de Las Moreras. Rodrigo Jiménez

El cordón policial dispersa el botellón y deja tan solo 36 multas en Valladolid durante la Noche de San Juan

La playa asistió vacía a la noche más corta del año y los agentes sancionaron a dos grupos concentrados bajo el puente de la Condesa Eylo y en Girón

J. Sanz

Valladolid

Miércoles, 24 de junio 2020, 10:13

El amplio despliegue policial en torno a la playa de Las Moreras evitó finalmente la celebración de la noche de San Juan, y la tradicional imagen de miles de jóvenes reunidos en la arena, si bien no pudo impedir que grupos dispersos se reunieran en ... distintos puntos de la capital para festejar la noche más corta del año con botellones, eso sí, en los que no hubo que lamentar incidentes. Las patrullas de la Policía Municipal recibieron «numerosos avisos» de vecinos alertando de la presencia de jóvenes en distintos parques de la capital, pero solo acabaron identificando y dispersando dos relativamente numerosos en el parque de la ribera del Pisuerga situado bajo el puente de la Condesa Eylo, del lado de La Victoria, junto al Camino del Cabildo, donde fueron identificados y denunciados por beber en la calle –la sanción es de treinta euros– 26 jóvenes a la una de la madrugada. Media hora después, en una explanada situada en el corazón de Girón, en la calle Haya, fueron sancionados otros diez jóvenes por el mismo motivo. Los policías, además, acudieron a otros parques de la capital como los de Parquesol o la urbanización Santa Ana, junto al Camino Viejo de Simancas, aunque a su llegada solo vieron a jóvenes dispersarse o grupos reducidos. No hubo más sanciones en una noche «muy tranquila» que concluyó con esas 36 denuncias, todas ellas a mayores de edad, en toda la ciudad. Fuentes del 112 confirmaron que tampoco se produjeron atenciones sanitarias por intoxicaciones etílicas o incidentes esa ­noche.

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El entorno de la playa y la chopera de Las Moreras amaneció por vez primera en lustros completamente limpio. Nada que ver con la tradicional alfombra de vasos, botellas y bolsas que el año pasado dejó veinte toneladas de ­basura.

No había ni un vaso y el único movimiento en el paraje a primera hora de la mañana fue el de los operarios retirando las vallas que acordonaron desde la tarde anterior la ribera, entre los puentes de Isabel la Católica y Mayor (paseo incluido), y los deportistas más madrugadores. Ni un rescoldo tuvieron que retirar los empleados municipales en una celebración inédita de San Juan en la que el amplio despliegue policial evitó la temida concentración de jóvenes en la ­playa.

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