Secciones
Servicios
Destacamos
«Al pueblo de Valladolid, a sus gentes y sus paisajes», comienza el texto que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, estampó el pasado miércoles en el libro de oro de la ciudad, un lujoso volumen encuadernado en terciopelo rojo, con remates dorados en esquinas y ... cierres, y el perfil de las páginas coloreado. El exalcalde Tomás Rodríguez Bolaños lo encargó en 1984, para que los reyes Juan Carlos y Sofía lo estrenaran durante la visita que hicieron a la provincia el 5 de abril de ese año. Fueron los primeros en dejar un recuerdo en forma de firma en un libro de honor que, desde entonces, se ha abierto en muy contadas ocasiones para que visitantes y vecinos ilustres dediquen unas palabras de recuerdo a Valladolid. La última página, escrita esta misma semana, es la de Pedro Sánchez; pero un paseo por las rúbricas permite descubrir autógrafos de extraordinario valor.
«Yo, a mi tierra que nunca dejé», escribió Rosa Chacel, escritora vallisoletana que durante años vivió en el exilio, y que firmó así en junio de 1988. Francisco Pino, otro ilustre de las letras locales, dejó su huella el 18 de enero de 2000, cuando a sus 90 años recibió el título de Hijo Predilecto de Valladolid: «A mi ciudad, la más lograda y bella de Europa». Los literatos abundan. Álvaro Mutis firmó el 8 de mayo de 2002. Mario Benedetti lo hizo en 1998, tras su paso por el jurado de la Seminci, y Gustavo Martín Garzo, en 2009: «En recuerdo de mi paso por el Ayuntamiento de mi ciudad que hoy, más que nunca, siento como mi propia casa»). Hay más artistas (el actor Juan Antonio Quintana, quien lanza un viva al teatro, o el humorista Leo Harlem) y también deportistas, como el futbolista Eusebio Sacristán y la gimnasta vallisoletana Débora Alonso, campeona del mundo en 1991. Pero destacan los políticos. Hay sobredosis de políticos. Presidentes del Gobierno, de la Junta, mil y un ministros de la democracia, desde Carmen Alborch (que firmó cuando fue pregonera de las fiestas de 1994: «A mi querida ciudad de Valladolid, cuna de grandes talentos») hasta Isabel Tocino, Jaime Mayor Oreja... o Ana Botella, cuando fue alcaldesa de Madrid.
La lista de embajadores que dejan recuerdo de su paso por la Semana Santa de Valladolid es interminable:México, Japón, Rusia, Kuwait... El Ayuntamiento invita a firmar a las visitas ilustres, pero también dejan testigo los pregoneros de la Semana Santa, de las fiestas de septiembre o las personas que se encargan de encarnar a los Reyes Magos en la cabalgata. Entre las firmas, la de George Bush (padre), presidente de EE UU entre 1989 y 1993, quien visitó Valladolid en 1994 (comió en La Fragua)para pronunciar una conferencia con la que se inauguró el auditorio de la Feria de Muestras.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.